Un nuevo ataque ruso en Odessa deja un muerto, decenas de heridos y graves daños en una catedral

Un niño ayuda a rescatar artículos en la Catedral de la Transfiguración de Odesa después de que fue gravemente dañada por los ataques con misiles rusos en Odesa, Ucrania, el domingo 23 de julio de 2023. (Foto AP/Jae C. Hong)
Un niño ayuda a rescatar artículos en la Catedral de la Transfiguración de Odesa después de que fue gravemente dañada por los ataques con misiles rusos en Odesa, Ucrania, el domingo 23 de julio de 2023. (Foto AP/Jae C. Hong)

ROMA.- La barbarie rusa cayó sobre el corazón espiritual de Odessa, la Catedral de la Transfiguración, que fue atacada durante la noche por un bosque de misiles que destruyeron la iglesia, pulverizaron el altar mayor y sepultaron el sagrado icono Kasperovskaya de la Madre de Dios bajo un montón de escombros humeantes. Hasta el momento anunciaron dos muertes y decenas de heridos.

Al menos 19 cohetes cayeron sobre el centro de la ciudad, entre ellos nueve Kalibr e Iskander derribados por el fuego antiaéreo ucraniano, así como los mortíferos Kh-22 y Onyx, que los sistemas de defensa de Kiev suministrados por sus socios internacionales fueron incapaces de interceptar y que se dirigieron directamente contra objetivos de interés cultural y logístico.

Además de la catedral, también sufrieron daños la Casa de los Científicos, el edificio del Liceo Estatal de Música de Odessa, al menos 25 edificios históricos y algunas infraestructuras portuarias.

Un edificio se ve muy dañado tras atauqes de misiles rusos en Odesa, Ucrania, el domingo 23 de julio de 2023. (AP Foto/Libkos)
Un edificio se ve muy dañado tras atauqes de misiles rusos en Odesa, Ucrania, el domingo 23 de julio de 2023. (AP Foto/Libkos)

El Ministerio de Defensa ruso negó el ataque y declaró que “la causa más probable de su destrucción fue la caída de un misil guiado anti aéreo ucraniano como resultado de las acciones de operadores analfabetos de sistemas de defensa aérea, que el ejército de Kiev colocó intencionalmente en áreas residenciales de áreas pobladas”.

Sin embargo, la reacción de Kiev fue inmediata: calificó al bombardeo como un “crimen de guerra” y el presidente ucraniano, Volodimir Zelensky, aseguró que su país reforzará definitivamente la defensa ucraniana después de la reunión que mantendrá este miércoles con la OTAN: “Ya hemos empezado a prepararnos para la semana que viene”, anunció.

A través de Twitter, lanzó un llamamiento a los aliados pidiendo “un verdadero escudo aéreo: la única forma de derrotar el terror de los misiles rusos”.

“Misiles contra ciudades pacíficas, contra edificios residenciales, contra una catedral... No hay excusa para el mal ruso. Este mal perderá. Y definitivamente habrá represalias contra los terroristas rusos que atacaron Odessa. Ellos sentirán esta represalia”, afirmó.

Las bombas de Moscú alcanzaron un total de diez regiones de Ucrania en 24 horas con un saldo de diez civiles muertos y más de 40 heridos. Y con el ataque a Odessa, según el secretario del Consejo de Seguridad y Defensa Nacional de Ucrania, Oleksiy Danilov, los rusos intentan cortar por completo el acceso de Kiev al Mar Negro, neutralizando así los esfuerzos internacionales para restaurar el funcionamiento del corredor de cereales.

La madre de un empleado que murió tras un ataque con misiles en un edificio administrativo en el centro de Odessa en el lugar del bombardeo el 20 de julio de 2023, en medio de la invasión rusa de Ucrania.(Photo by Oleksandr GIMANOV / AFP)
La madre de un empleado que murió tras un ataque con misiles en un edificio administrativo en el centro de Odessa en el lugar del bombardeo el 20 de julio de 2023, en medio de la invasión rusa de Ucrania.(Photo by Oleksandr GIMANOV / AFP) - Créditos: @OLEKSANDR GIMANOV

Contradicciones

Luego del ataque, Vladimir Putin se reunió en San Petersburgo con su fiel aliado bielorruso, Alexander Lukashenko, quien reiteró que la contraofensiva ucraniana “fracasó” y lanzó una nueva alarma incontrolable: “Los Wagner están empezando a estresarnos porque quieren ir a Occidente, marchar a Varsovia y caminar hacia Polonia, a Rzeszow”, advirtió el bielorruso, proporcionando a Putin garantías sobre su capacidad para controlar a los mercenarios (“los mantengo en el campamento”) y dio detalles sobre el redespliegue de las fuerzas armadas polacas hacia las fronteras con Bielorrusia.

Sin embargo, la valoración del secretario de Estado norteamericano, Antony Blinken, fue la opuesta. Según él, la contraofensiva “está al principio” y “llevará meses”. En una entrevista concedida ayer a la CNN declaró que Ucrania “ya recuperó cerca del 50% de lo que le fue arrebatado inicialmente” y que se enfrenta a “una lucha muy dura” para recuperar más.

El secretario de Estado estadounidense Antony Blinken habla a la prensa en el Departamento de Estado, Washington, 17 de julio de 2023. (AP Foto/Manuel Balce Ceneta)
El secretario de Estado estadounidense Antony Blinken habla a la prensa en el Departamento de Estado, Washington, 17 de julio de 2023. (AP Foto/Manuel Balce Ceneta)

A finales del mes pasado, el presidente ucraniano fue citado diciendo que el progreso de la contraofensiva contra las fuerzas rusas estaba siendo “más lento de lo deseado”. Ucrania reconquistó algunas aldeas en el sur y territorio en torno a la arrasada ciudad de Bajmut, en el este, pero no ha logrado un avance importante contra las líneas rusas, fuertemente defendidas.

A la pregunta de si Ucrania recibirá aviones de combate F-16 de fabricación estadounidense, Blinken dijo que creía que sí. “Y lo importante es asegurarse de que, cuando lo hagan, estén debidamente entrenados, sean capaces de mantener los aviones y los utilicen de forma inteligente”, señaló.

Una coalición de 11 países empezará a formar a militares ucranianos para pilotar los F-16 en agosto en Dinamarca, y se creará un centro de formación en Rumanía.

Ucrania lleva mucho tiempo solicitando los F-16 de Lockheed Martin, pero el asesor de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Jake Sullivan, dijo el mes pasado que no había una decisión definitiva sobre el envío de los aviones por parte de Washington. Funcionarios estadounidenses han estimado que se necesitarían al menos 18 meses para el entrenamiento y la entrega de los aviones.

Hasta ahora, Estados Unidos ha concedido a Ucrania más de 41.000 millones de dólares en ayuda militar desde que Rusia la invadió en febrero de 2022.

Agencias AFP y AP