Ataque con cuchillo en un colegio en Francia: un hombre al grito de “Allah es grande” mató a un profesor y dejó varios heridos

PARIS.– Un muerto y varios heridos fue el saldo de un ataque perpetrado esta mañana en un colegio del norte de Francia por un individuo de nacionalidad chechena, al grito de “Allahu Akbar” (Allah es grande), que fue inmediatamente arrestado.

Probablemente inspirado por la guerra entre Israel y Hamas, el atacante, Mohammed Moguchkov, de 20 años, fichado por la policía, al igual que su hermano, que cumplió 18 meses de prisión por haber difundido consignas del Estado Islámico, fueron detenidos por las fuerzas de seguridad. El asesino, vigilado por los servicios de inteligencia franceses para el interior (DGSI), había sido controlado el jueves.

Armado de un cuchillo, Moguchkov entró alrededor de las 11 hora local (6 en la Argentina) en el colegio y, al grito de “Allah Akbar” —según varios testigos— apuñaló a un profesor en circunstancias aún no determinadas. Otras varias personas habrían resultado heridas. Entre ellos, otro profesor y un agente de seguridad, apuñalado numerosas veces y en grave estado. Según el prefecto de policía de Arras —ciudad del norte de Francia donde ocurrieron los hechos— hubo dos heridos de gravedad.

El atacante, así como su hermano —que no estaba presente en el colegio— fueron detenidos por la policía poco después, según el ministerio del Interior. Ambos serían de origen checheno. Todos los establecimientos escolares de la ciudad fueron confinados, mientras que el Raid, unidad policial de intervención especializada en la lucha contra todo tipo de criminalidad, fue puesto en alerta máxima.

Un video, filmado desde una de las ventanas del colegio por los alumnos, aterrados, muestra al agresor, armado con un cuchillo, atacando a quienes estaban presentes en el patio del establecimiento. Avanza con seguridad, vestido con una campera gris, mientras sus víctimas intentan mantenerlo a distancia con una silla. Una de ellas cae al piso: “¡Es el subdirector!”, dice una voz en el video. El hombre a tierra es golpeado y pateado por el atacante, que se dirige hacia otra persona con una total determinación.

Según varias fuentes, la familia del islamista debería haber sido expulsada de Francia en febrero de 2014. Por entonces, los Moguchkov fueron despertados por la policía de fronteras. Los padres y sus cinco hijos fueron conducidos al aeropuerto, donde los esperaba un vuelo con destino a Moscú. La expulsión finalmente fracasó gracias a la firme oposición de las ONG de defensa de los migrantes. La policía francesa aún no ha confirmado esta versión.

Ayer, poco antes de las 13 (hora local) el tribunal nacional antiterrorista abrió una causa por “asesinato de carácter terrorista, intento de asesinato terrorista, y asociación de terroristas con la intención de matar”. Las investigaciones fueron confiadas a la subdirección antiterrorista de la Dirección Nacional de la Policía Judicial (SDAT), y a la Dirección General de Seguridad Interior (DGSI).

Este nuevo ataque se produce tres días antes de la conmemoración del aniversario del asesinato del profesor de Historia Samuel Paty, el 16 de octubre de 2020, en la ciudad de Conflans-Sainte-Honorine en las afueras de París. Paty también fue víctima de un islamista checheno, Abdullah Anzorov, inspirado por un video que deploraba que el profesor de 47 años hubiera mostrado en clase caricaturas del profeta.

Tanto Francia como la mayoría de los países europeos se encuentran en alerta máxima desde que el movimiento terroristas Hamas atacó Israel el 6 de octubre. Las autoridades francesas han prohibido toda manifestación de apoyo a los palestinos, para evitar que degenere en una apología del terrorismo, actitud penada por la ley. Según el ministerio del Interior, desde el sábado pasado, se registraron en el país un centenar de hechos antisemitas.

Al mismo tiempo, Hamas, a través de uno de sus miembros fundadores, Jalid Mashal, llamó hace pocos días a los musulmanes de todo el mundo a manifestar su indignación este viernes 13 de octubre, conminándolos a cometer acciones sangrientas.

A fines de septiembre, una fuente de la seguridad nacional anunció la aparición de una “nueva generación radical”, especialmente de jóvenes inmigrantes de la región norte del Cáucaso.