Asocian el divorcio con un aumento del riesgo de infarto

Por Kathryn y Doyle (Reuters Health) - Las mujeres con un divorcio o los hombres con por lo menos dos divorcios son más propensos a tener un infarto que las personas con un matrimonio estable, según demuestra un nuevo estudio. "Conocemos las consecuencias negativas del divorcio para la salud", dijo el autor principal, Matthew E. Dupre, del Instituto de Investigación Clínica de Duke, Durham, Carolina del Norte. Su equipo observó que volver a casarse revertía el riesgo sólo en los hombres. El riesgo de infarto en las mujeres con dos divorcios era similar al que está asociado con la diabetes o la hipertensión. El equipo analizó datos de más de 15.000 adultos de entre 45 y 80 años al inicio del estudio y habían tenido por lo menos un matrimonio. El seguimiento duró entre 1992 y el 2010. El 14 por ciento de los hombres y el 19 por ciento de las mujeres estaban divorciados al comienzo del estudio. Un tercio de los participantes se había divorciado por lo menos una vez al final del estudio. En los 18 años que duró la investigación, 1.211 personas tuvieron un infarto, principalmente los que se habían divorciado, según publica el equipo en Circulation: Cardiovascular Quality and Outcomes. El equipo tuvo en cuenta factores como la edad, el nivel socioeconómico, las conductas y el estado de salud. Las mujeres con un divorcio eran un 24 por ciento más propensas a tener un infarto que aquellas con un matrimonio estable, mientras que ese riesgo aumentaba al 77 por ciento en las mujeres con dos divorcios o más. Las mujeres que se volvieron a casar eran un 35 por ciento más propensas que aquellas con un matrimonio estable a tener un infarto. En los hombres, el riesgo aumentó sólo en los participantes con dos o más divorcios: ese grupo era un 30 por ciento más propenso a tener un infarto que aquellos con un matrimonio estable o que se habían vuelto a casar. "Estudios previos habían sugerido que la separación marital afecta más la salud de la mujer que del hombre -dijo Dupre vía e-mail-. No conocemos completamente los motivos de estas diferencias, pero predomina la idea de que las divorciadas padecen más problemas económicos y emocionales que los divorciados. Los hombres son mucho más propensos a volver a casarse y, además, lo hacen más rápido que las mujeres". Aclaró que, aunque los resultados son una evidencia sólida de que el divorcio aumenta el riesgo de infarto, el equipo no tuvo en cuenta otros factores potencialmente relevantes, como el estrés, la ansiedad y la pérdida de la contención social o las variaciones en el cumplimiento de los tratamientos médicos. Tampoco pudo considerar si el riesgo aumenta o disminuye en el tiempo después del divorcio. "Existen suficientes publicaciones sobre la relación entre el cambio del estado civil y la salud física", indicó David A. Sbarra, del Departamento de Psicología de University of Arizona, Tucson. "Habría anticipado que el riesgo aumenta en los hombres después de un divorcio, pero eso no es lo que informa el estudio", indicó. "Lo más difícil al trabajar con este tema es no poder indicarle a un grupo al azar que se divorcie para poder estudiarlo". Sbarra dijo que el divorcio actuaría como un sustituto de otras variables, como la hostilidad, que impulsa a la gente a terminar con el matrimonio y, también, a aumentar el riesgo de tener un infarto. FUENTE: Circulation: Cardiovascular Quality and Outcomes, online 14 de abril del 2015.