El Asesino Silente hace ruido al vencer a una leyenda de la UFC con un juego implacable de piso

El Asesino Silente hizo ruido de una forma diferente.

Vicente Luque no estuvo a la altura de su reputación como rematador despiadado, pero mostró importantes novedades y sofocó el plan de ataque de Rafael dos Anjos para ganar el sábado una decisión unánime en UFC Fight Night en Las Vegas.

Luque ganó con un puntaje de 49-46 en una boleta y un par de jueces le vieron ganar 48-47 en gran parte gracias a ocho derribos, la mayor cantidad de su carrera para sorprender de cierta forma a Dos Anjos, un reconocido maestro de jiu-jitsu brasileño.

Para poder pelear esta noche, Luque necesitaba una aprobación especial de la comisión de Nevada debido a una hemorragia cerebral que se derivó de su derrota por nocaut en agosto del 2022 ante Geoff Neal y luego de una larga sesión fue autorizado a competir.

“Es un milagro que esté aquí’’, expresó un emocionado Luque al final del combate.

“Nunca he tenido miedo de nada, pero tenía miedo de no volver aquí. “En el primer asalto tenía miedo de que me golpearan. Ha pasado un año. No sabía cómo reaccionaría’’.

Por su parte, Dos Anjos, un excampeón de peso ligero, hizo el cambio permanente al peso welter en busca de ser campeón mundial una vez más, aunque después de esta derrota y con 38 años de edad tendrá que repensar sus planes de futuro.

En su trayectoria, Luque ha finalizado 13 oponentes en 14 peleas de UFC, el tercer porcentaje más alto en la historia de la empresa, pero detener a uno de los veteranos más experimentados y probados en batalla resultaba una tarea difícil.

El plan de juego de Dos Anjos era bastante sencillo: abrirse camino hacia adentro y derribar al oponente más joven y duro, pero Luque no solo enseñó mejoras significativas en su defensa contra derribos, sino que también mostró aplomo y madurez al anotar sus propios derribos.

De round en round, Dos Anjos trató de presionar y llevar al suelo a su rival y para el quinto round parecía que podía darle un vuelco a su suerte, pero fue muy poco y demasiado tarde porque Luque apretó el paso con sus derribos en cadena.

Y ahora que respira de nuevo y ha conseguido un nuevo balón de oxígeno en su carrera, Luque llamó a un oponente clasificado dentro de los cinco primeros en el ranking del peso welter de la UFC con la esperanza de abrir otro camino hacia una faja mundial.