Arropan priistas a Xóchitl Gálvez en Hidalgo; “me siento orgullosa de ser su candidata”

undefined
undefined

La mañana del jueves 12 de octubre, cuando Ernestina acudió a su trabajo en la Central de Abastos de Tulancingo la invitaron a acudir al evento de Xóchitl Gálvez, virtual candidata presidencial del Frente Amplio por México, en Chimalapa, una pequeña comunidad de 2 mil habitantes, enclavada en la Sierra de Tenango.

La mujer que se dedica a la siembra de verduras, como zanahoria y calabazas, cuenta que a ella y a otras personas les pusieron a su disposición camiones, en los que se trasladaron a las canchas de futbol techadas de la comunidad de Chimalapa, a 48 minutos de la Central de Abastos.

Una fila de combis en forma de serpentina mostraba el camino directo hacia las canchas de futbol. Ahí, una fumarola negra cubrió ligeramente el rostro de Xóchitl Gálvez, como parte del ritual para el buen augurio rumbo a sus aspiraciones presidenciales.

Gálvez portó un xochimapal rojo, una vara con tres ramificaciones adornadas con flores y su cabeza fue adornada con un pan gigante que fungía de sombrero, se trata de la vestimenta típica en Acaxochitlán, municipio de Hidalgo.

A casi un mes del arranque oficial del periodo de precampaña para renovar la presidencia, Xóchitl Gálvez decidió regresar a sus orígenes, a la comunidad de Chimalapa, en Acaxochitlán, a 127 kilómetros de distancia de Tepatepec, el pueblo en el que nació 60 años atrás.

Leer más | Xóchitl Gálvez está en contra de iniciativa para reducir jornada laboral a 40 horas; “no es el momento oportuno”, considera

Este jueves regresó a su tierra, cuatro décadas después de que salió con el sueño de convertirse en Ingeniera en Computación. Esta vez regresó acompañada del PRI para pedir a los pobladores, en su mayoría indígenas, que la apoyen en su aspiración para convertirse en la primera presidenta mexicana.

Xóchitl Gálvez en Hidalgo.
Xóchitl Gálvez en el evento al que asistió este 12 de octubre en Hidalgo. Foto: Gabriela Soto

Lee: Xóchitl Gálvez se baja de la bicicleta; acepta la protección del Ejército

Viggiano, refuerzo en Hidalgo

La estructura del PRI se volcó ayer para arropar a Xóchitl Gálvez en su tierra natal. A lo largo del día, Gálvez estuvo acompañada por la secretaria general del PRI, Carolina Viggiano, quien fue candidata a la gubernatura de Hidalgo por la alianza Va por México en 2022, cuando por primera vez el partido tricolor perdió el bastión frente al morenista Julio Menchaca.

Por la mañana, Gálvez y Viggiano se reunieron con el arzobispo de Tulancingo, monseñor Domingo Díaz Martínez. Más tarde, juntas recorrieron las calles y plazuelas de la misma ciudad, en la que se tomaron fotografías con los hidalguenses.

El PRI es el segundo partido político mejor posicionado en Hidalgo. Fue el partido de la alianza que más votos captó en la elección a la gubernatura en 2022 con Viggiano como candidata al obtener 246 mil 355 sufragios. El PAN sumó 53 mil 855 y el PRD 23 mil 741.

Al final, Va por México sumó 355 mil 531, mientras que Morena y sus aliados políticos, con Menchaca al frente, obtuvieron 658 mil 562.

En Hidalgo, Gálvez se dejó arropar por los priistas, quienes demostraron su músculo en los dos eventos. “Ahora voy con el PRI”, dijo Gálvez al bajar de la camioneta que condujo Alejandro Moreno, dirigente nacional del partido, al segundo evento realizado en Pachuca de Soto.

“Me siento muy orgullosa de ser la candidata del PRI”, comentó al cierre de su jornada.

En el evento de Xóchitl Gálvez organizado por el PRI se congregaron alrededor de 500 personas.
En el evento de Xóchitl Gálvez organizado por el PRI se congregaron alrededor de 500 personas. Foto: Gabriela Soto

Lee: “No me asusto ni me rajo”: Xóchitl Gálvez dice que si la UNAM anula su título, presentará un nuevo trabajo

En la Sierra

Por la mañana, acompañada de Viggiano, la virtual candidata presidencial de la oposición se trasladó 30 kilómetros desde Tulancingo rumbo a la Sierra de Tenango, a la comunidad de Chimalapa, en el municipio de Acaxochitlán, a 127 kilómetros de Tepatepec, el pueblo donde Gálvez vivió hasta los 17 años.

En Chimalapa, una pequeña comunidad de apenas 2 mil 217 habitantes enclavada en la Sierra de Tenango, la virtual candidata presidencial de la oposición fue recibida con un ritual indígena.

En el evento organizado por el PRI se congregaron alrededor de 500 personas, principalmente simpatizantes priistas, mientras que los habitantes al escuchar el inusual mitin se acercaron a ver a la candidata.

La aún senadora de la República estuvo acompañada por el dirigente Alejandro Moreno y los dirigentes estatales de los partidos políticos que conforman el Frente Amplio: del PRI, Marco Mendoza; del PAN, Claudia Luna Isla y del PRD, Jorge Pérez.

Lee: Xóchitl Gálvez y Claudia Sheinbaum llevan sus campañas anticipadas al Congreso

Promete legislación sobre consulta

Con un pan colocado como sombrero en la cabeza, Gálvez tomó el micrófono y les habló a los asistentes. Les contó de sus orígenes indígenas y su historia de trabajo que la llevó a ser la candidata presidencial de la oposición.

Tras un largo discurso que se prolongó por 40 minutos, la senadora se comprometió a sacar la reforma Constitucional en materia de consulta a los pueblos indígenas que está atorada en el Senado de la República.

“Ya les puse la iniciativa para que la saquen y con eso nunca más van a poder hacer obras que no consulten con los pueblos y comunidades indígenas, que tendrán un beneficio específico a las comunidades indígenas si tienen que ceder parte de sus tierras para caminos, para obras de infraestructura, porque en el pasado no se les pagaba”, reclamó.

Lee: Claudia Sheinbaum y Xóchitl Gálvez: las virtuales candidatas que buscan ser la primera mujer presidenta de México

Al finalizar, militantes y simpatizantes del PRI ofrecieron comida a los asistentes.
Al finalizar, militantes y simpatizantes del PRI ofrecieron comida a los asistentes. Foto: Gabriela Soto

Asistencia escéptica

Agustín Martínez llegó del pueblo vecino Los Reyes hasta Chimalapa para ver a Gálvez acompañado de su esposa y sus tres pequeños niños.

“Soy realista y digo, de momento, todas y todos los candidatos todo lo dicen a su manera, que les convenga. Realmente, si es indígena que nos apoyara, que viera nuestros caminos, las necesidades que hay”, demandó Agustín de 43 años.

Del lado de las gradas, vestidas en un traje típico de la comunidad indígena estaba sentada Jessica, quien al ver la congregación se acercó a escuchar las promesas, de las cuales se mantiene escéptica, pues considera que será difícil que se cumplan.

“Ojalá, que nos ayude en todo lo que nos prometió, dijo que nos iba ayudar a los indígenas, ojalá nos cumpla”, dijo Jessica, de 29 años.

Al finalizar, militantes y simpatizantes del PRI ofrecieron comida (arroz con carnitas y tortillas) y bebidas azucaradas a los asistentes.