Arquidiócesis de Tijuana recibirá reliquias de San Charbel este sábado

La Arquidiócesis de Tijuana anunció que recibirá las reliquias del Santo Chárbel del sábado 24 al lunes 26 de junio del presente año, en la parroquia Santa Reina de la Paz Tijuana, en la colonia Independencia.
Con motivo del bicentenario del nacimiento y por el 50 aniversario de la canonización de Chárbel Makhlouf, la comunidad Maronita de México, ha invitado a las diócesis del país para que reciban las reliquias de primer y segundo grado, que contienen fragmentos óseos, una estola y un cinturón de hábito.

El programa comenzará el sábado 24 junio a las 18 horas con la celebración de la Santa Misa para la recepción solemne de las reliquias de San Chárbel
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El domingo 25 de junio, el programa comenzará a las 9:00 de la mañana, con la Santa Misa para los niños; a las 12:00 del mediodía, se llevará a cabo la misa para jóvenes; a las 18 horas será la misa especial para los enfermos.
Finalmente, el lunes 26 las reliquias viajarán a la Diócesis de Mexicali.
Chárbel Makhlouf
Nació en Beqakafra, Líbano, un 8 de mayo de 1828. A la edad de tres años, su padre muere y queda al cuidado su madre, quien se casaría en segundas nupcias, con un creyente que, tiempo después, llegaría a ser sacerdote maronita, porque los hombres casados pueden acceder a distintas órdenes bajo el rito de San Marón.
En 1851 ingresó como novicio en el monasterio maronita de la localidad de Mayfouq y recibió el nombre de Fray Chárbel.
En 1853 hizo los votos solemnes en el monasterio de Annaya, donde vivió hasta su muerte y en 1859 fue ordenado sacerdote.
Su vida espiritual se destacó por su amor a Cristo, el ayuno, el sufrimiento y por sus oraciones, así como el don de la adivinación y taumaturgia (sanación de enfermos por medios sobrenaturales).
Murió durante la Nochebuena de 1898, a causa de una parálisis. De su tumba, según creyentes, emanaba un líquido acuoso de sangre, siendo este un caso de emanación milagrosa, similar a la de San Jenaro de Nápoles o San Nicolás Tolentino.
En 1965 fue beatificado por el Papa Pablo VI; en 1977 se llevó a cabo su canonización.
Entre los milagros que se le atribuyen, está el de Nohad El Chami. Una noche de enero de 1993, una mujer de 55 años, paralizada por hemiplejia, vio en sueños a dos monjes acercándose a su cama, uno de ellos era San Chárbel, quien caminó hasta ella y puso sus dedos sobre la garganta de la enferma, asegurando que había ido a operarla. Una vez que la mujer despertó, volvió caminar; tenía dos dedos marcados sobre el cuello, donde se cree que estuvo puesta la mano santa de Chárbel.

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