En Arabia Saudí, una banda femenina de rock psicodélico se abre paso en una sociedad conservadora

De izquierda a derecha, miembros de la banda Seera, entre ellos Thing, Nora, Hayahuascah y Meesh, se toman una selfie durante una entrevista con The Associated Press, el domingo 12 de mayo de 2024, en Riad, Arabia Saudí. (AP Foto/Baraa Anwer)

RIAD, Arabia Saudí (AP) — Inclinada ante el micrófono en la capital de Arabia Saudí, Nora soltó un grito primigenio. Las guitarras aullaban y la batería palpitaba detrás de ella en una presentación reciente con sus compañeras de banda.

La presentación de Seera, un grupo femenino de rock psicodélico que mezcla melodías árabes tradicionales con la psicodelia resurgente de bandas como Tame Impala, habría sido impensable hace sólo unos años en el reino.

Pero a medida que Arabia Saudí liberaliza algunos aspectos de su sociedad, Seera representa el modo en que las mujeres encuentran ahora su voz y se expresan a través de las artes en una nación que durante mucho tiempo ha sido relacionada con el islam ultraconservador y la estricta separación de los sexos.

“No sabíamos cómo reaccionaría la gente”, dijo Meesh, bajista del grupo, que al igual que las demás integrantes pidió se le identificara solamente por su nombre artístico. “Creemos firmemente en la autoexpresión. Para nuestra sorpresa, ellos realmente nos abrieron los brazos”.

El nombre de la banda, Seera, puede significar “vida” o “biografía” en árabe. Los miembros de la agrupación dicen que intentan abarcar en su sonido los diversos significados que se pueden extraer de una palabra de ese idioma, ya sea a través de la batería y los platillos o del sintetizador que acompaña a las guitarras.

El estilo musical de Seera gira en torno a las experiencias vitales de las cuatro integrantes de la banda, todas de nacionalidad saudí. Cantan en el dialecto saudí del árabe, mientras que la baterista Thing lleva la cara cubierta con un bordado rojo tradicional.

“Pensé que esto sería sensacional como un reflejo de la cultura, la herencia y las raíces”, explica. “Al mismo tiempo sería una representación genial entre lo tradicional y lo moderno y la expresión de ello. Eso también forma parte de nuestra identidad sonora”.

Seera se apresura a señalar que no son la primera banda femenina del reino. Dicen que la primera fue The Accolade, que se formó en 2008 y sólo podía tocar clandestinamente. Las cosas han cambiado radicalmente en el país en los últimos años desde la ascensión del rey Salman y su hijo, el príncipe heredero Mohamed bin Salman.

En 2018, las mujeres obtuvieron el derecho a manejar. Se abrieron cines y otros centros de entretenimiento. Las mujeres ya no están obligadas a llevar la abaya negra que las cubre por completo.

Siguen existiendo límites claros a la libertad de expresión y a cualquier actividad política en el reino gobernado con mano dura. Pero en el ámbito artístico, Arabia Saudí se está abriendo poco a poco, como se pudo ver en el espectáculo de Seera este mes en The Warehouse, un espacio de música en vivo en el barrio Diriyah de Riad.

Allí, docenas de jóvenes con chaquetas de cuero y camisetas negras de rock se balanceaban y bailaban al ritmo de la música. Un hombre joven con mucho delineador de ojos llevaba una camiseta con la leyenda: “ODIO LA VIDA”. Los estilos de ropa en el lugar eran similares a los que se observarían en cualquier otro espectáculo punk en una discoteca occidental, aunque en el reino no se fuma ni se bebe alcohol.

“Las cosas han mejorado definitivamente, más hacia la inclusividad y en una perspectiva más amplia”, dijo Thing. “Definitivamente hay espacio para más crecimiento”.

Seera tiene previsto lanzar su primer álbum más adelante este año. También han puesto fecha para su primer concierto internacional en Dubái, donde subirán al escenario por primera vez fuera de Arabia Saudí.

Nora dijo que quería que la banda sea “una inspiración para que las nuevas generaciones” se expresen.

“Está bien tener el aspecto, la actuación o el comportamiento que uno quiera, siempre y cuando no se haga daño a nadie”, afirmó.