AMLO y Salinas Pliego, el pleito por culpa del dinero y los impuestos en donde se mide quién tiene más poder

Andrés Manuel López Obrador, presidente de México y Ricardo Salinas Pliego | FOTO: MISAEL VALTIERRA / CUARTOSCURO.COM
Andrés Manuel López Obrador, presidente de México y Ricardo Salinas Pliego | FOTO: MISAEL VALTIERRA / CUARTOSCURO.COM

Algunos de los hombres ricos y poderosos de México deben el crecimiento de sus empresas a su relación con el gobierno. Este camino lo han recorrido muchos.

El caso de Ricardo Salinas Pliego es particularmente notorio porque su fortuna y negocios crecieron exponencialmente a partir de que obtuvo la concesión para operar Imevisión, acto seguido creo la empresa Televisión Azteca. Desde esa plataforma empujó sus otros negocios, relacionados con la venta de enseres para el hogar, Elektra, creó el Banco Azteca, diversificó sus empresas e incursionó en Centro, Sudamérica y los Estados Unidos.

La buena fortuna de Ricardo Salinas Pliego y sus contactos con los gobiernos y políticos posteriores a 1993 le permitieron avanzar y establecer relaciones convenientes para sus empresas y negocios. Siempre cercano al poder en el último ciclo se hizo “amigo” de Andrés Manuel López Obrador.

Esa amistad permitió a Salinas Pliego proponer a López Obrador, el día de su triunfo electoral, la integración de un Consejo Asesor Empresarial de la Presidencia, que aglutinó a los empresarios más importantes de México y cercanos al presidente, pero que no funcionó.

Lo que sí funcionó en los primeros años del sexenio fue el apoyo que Salinas Pliego le otorgó al gobierno de López Obrador, quien nombró en su gabinete a cercanos al empresario. Siendo los programas sociales importantes para la 4T, la dispersión de los recursos para los beneficiarios se llevó a cabo por medio de la red de sucursales de Banco Azteca. El empresario accedió en bajar las comisiones por envío de remesas, que realizan los paisanos en EEUU.

Hoy esa “bonita” amistad atraviesa por un mal momento y todo por culpa del dinero. El Sistema de Administración Tributaria (SAT) desde 2021 reclama a Salinas Pliego y sus empresas el pago de adeudos fiscales que, a la fecha, según el director del SAT, Antonio Martínez Dagnino, adeudan 53 mil millones de pesos, que están en juicios fiscales anteriores a esta administración y en proceso. Adicionalmente a la actual administración le adeudan 10 mil millones, con lo cual la deuda total es de 63 mil millones de pesos.

Para el gobierno de López Obrador es importante el flujo de dinero para atender los programas sociales que benefician a los grupos que considera vulnerables. En repetidas ocasiones, en la mañanera, se ha referido al adeudo fiscal de Salinas Pliego y sus empresas y hasta le ha ofrecido autorizar quitas que reducirían el total, con tal de que pague lo que debe al fisco.

Por más de dos años la demanda de pago de adeudos a Salinas Pliego se ha mantenido en la mañanera. No ha pagado, pero sí puso en operación la estrategia de atacar como mecanismo de defensa. A partir de 2021 empezó a criticar a la 4T y sus políticos a los que llama “gobernicolas”.

Imitando la práctica de su “amigo” Andrés Manuel, recientemente Salinas Pliego se ubicó en la escena como víctima. Acusó al gobierno, particularmente a Jesús Ramírez, vocero de presidencia, de realizar una campaña en su contra para dañar su imagen. “Utilizan redes sociales y medios públicos, así como periodistas de mentiras e intelectuales de cuarta para aventar mierda y enlodar nuestra imagen”.

En el último episodio entre el que cobra y el que no quiere pagar, el tono y las acusaciones escalaron. Continúan diciendo que son buenos amigos y que el asunto que los enfrenta no es personal.

En sus redes sociales Salinas Pliego publicó un video en el que respondió al gobierno de López Obrador. “Las afirmaciones de parte de mi amigo el presidente Andrés Manuel López Obrador, en el sentido de que Grupo Salinas ha dejado de pagar una cantidad altísima de impuestos. No es cierto, pagamos muchísimo, yo en lo personal pago cantidades obscenas de impuestos, entonces nada más falso”.

Aclarado el punto, Salinas Pliego comentó que estas controversias “Son maniobras distractoras del gobierno para desviar la atención de los grandes problemas que vive el país: la violencia, la inseguridad y el miedo, y número dos: este olor a corrupción que ya está apestando mucho”.

Cuestionó la estrategia de seguridad de López Obrador, así como la falta de transparencia en las obras emblemáticas de su gobierno.

No parece que esta controversia vaya a terminar pronto. Así como los empresarios han hecho su fortuna a la sombra del gobierno en turno, parte de los acuerdos, no escritos, es el intercambio de favores mutuos uno de esos es la tolerancia para evadir el pago de impuestos. Para los empresarios es parte del negocio. No pagar para acumular y crecer. A estas alturas del sexenio difícilmente la 4T podrá cobrar los adeudos. Para Salinas Pliego es más barato pagar a los abogados que pagarle al SAT.

Si el próximo gobierno quiere cobrar tendrá que hacerlo al principio con la advertencia de no renovar las concesiones de TV que Salinas Pliego explota.

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