Ambientalista construye una casa ecológica por solo 1,500 dólares

La iniciativa es tan amigable para el planeta como para el bolsillo. Reutilizando materiales e invirtiendo solamente 1,500 dólares, Rob Greenfield fabricó su nuevo hogar en Orlando, Florida. Su intención es demostrar que es posible vivir bien, sin contaminar el medio ambiente ni consumir grandes cantidades de recursos.

“Bienvenidos a mi pequeño hogar, donde vivo de manera simple y sustentable”, posteó Rob. Crédito: Instagram <a href="https://www.instagram.com/p/BuH6grNAYFt/" rel="nofollow noopener" target="_blank" data-ylk="slk:@robjgreenfield;elm:context_link;itc:0;sec:content-canvas" class="link ">@robjgreenfield</a>
“Bienvenidos a mi pequeño hogar, donde vivo de manera simple y sustentable”, posteó Rob. Crédito: Instagram @robjgreenfield

Simple y sustentable, el leitmotiv

La vivienda de 9 metros cuadrados brinda las mismas comodidades que una casa normal: tiene una cama, estantes para libros, mesa y refrigerador. También una cocina al aire libre, una ducha de agua de lluvia junto al sistema de recolección de agua, un inodoro de compost y, por supuesto, un jardín, donde, dice, pasa la mayor parte de su tiempo.

Aunque el proyecto no está completamente terminado, Rob ha podido mudarse y seguir avanzando desde allí. Uno de los próximos pasos será alejarse de todas las fuentes de energía no renovable, aunque ahora gasta 100 dólares anuales por una pequeña cantidad de electricidad.

Filosofía de vida

Greenfield intenta llevar una vida sustentable en todo sentido. Por un año, solo bebe agua de lluvia y por un año se alimentará solo de los productos que él mismo cultive.

La huerta también incluye una planta cuyas hojas suaves reemplazan al papel higiénico. Además, su sistema de inodoro no contaminante se convierte luego en fertilizante.

Desde su Instagram comparte otros hábitos ecológicos como la limpieza dental con ramas, un método ancestral conocido como Miswak.

View this post on Instagram

This is a chew stick, a stick used for cleaning teeth, with a history far pre-dating that of current plastic tooth brushes. They have been used in many different cultures with different types of twigs. One of the more known versions is the miswak stick from the Salvadora persica tree used in parts of Asia and Africa. I have been using these throughout much of 2018 and have found them to be so incredibly effective. My teeth are often cleaner after using a chew stick than when I use a tooth brush. When one wears out after a few weeks, I can literally just toss it out my window into my yard. It’s just a twig, cut to the length of about four inches. This is truly sustainable oral care if you ask me. The best combination I’ve found for my oral care is my bamboo toothbrush (with boar hair bristles), my chew stick, and silk dental floss in a reusable glass container. Both of those I got through @lifewithoutplastic and are 100% biodegradable right in my home compost bin. For toothpaste I’ve used Jason Powersmile for the last 5 years. It’s a healthy paste and the natural ingredients allow me to use it with my greywater on plants. After a few years of interest, I finally started using chew sticks when I had a chance encounter with a wonderful man named Dr. Doug. Cheryl and I were hitchhiking home and he picked us up. He is a former dentist, now spreading this sustainable form of dental care. He gave me a handful of these sticks and I’m definitely an advocate for them now. He started a very small business and you can buy these from him through his website at www.doctordougschewstick.com. It is $10 for 10 sticks. His website is new, so if it’s not working just email info@doctordougschewstick.com Health and happiness to you all! Rob – (Note: This is not a paid post. I just love Doctor Doug and think chewsticks are a worthwhile thing to share with you all. Learn more about my transparency at www.robgreenfield.tv/financialtransparency) Photo by @sierrafordphotography #cleanteeth #dentist #dentalhealth #sustainablehygiene #hygiene #bambootoothbrush #oralcare #biodegradable #reducewaste #reduceplastic #saynotoplastic

A post shared by Rob Greenfield (@robjgreenfield) on Jan 23, 2019 at 7:01am PST

Un rostro familiar en la protección del medio ambiente

Rob lleva 6 años comprometido con un estilo de vida en favor del medio ambiente y ha participado en algunas operación mediáticas. A finales de 2016, se paseó por las calles de Nueva York vestido de “el hombre basura”, para visibilizar la enorme cantidad de deshechos generados por los estadounidenses.

Rob casi no produce basura pero para esta causa decidió consumir durante un mes como una persona promedio y generar así unos 2 kilos de basura diarios.

Durante un mes, Rob cargó en su cuerpo toda la basura que produjo. Crédito: Non Stop People
Durante un mes, Rob cargó en su cuerpo toda la basura que produjo. Crédito: Non Stop People

Otras de sus campañas fueron recuperar basura en las papeleras y pasar más de un año viviendo en una casa sin agua corriente ni electricidad. Además, tuvo su propio programa en el canal Discovery.

Aunque la casita ecológica de Greenfield puede incluso parecer tentadora, no está claro si el ambientalista tiene un plan de emergencia en caso de que algún huracán azote el área de Orlando, en el centro de Florida, durante su año de residencia allí.