Alumnos y padres extrañan al ‘increíble’ director escolar en medio de escándalo de deportistas transgénero

En su primer día como director de la secundaria Monarch al comienzo del año escolar 2022-23, James Cecil se paró afuera, saludando a todos los estudiantes.

Pronto lanzó una serie mensual llamada “Café con el director”, un espacio para que los padres compartieran sus preocupaciones directamente con el nuevo administrador, y reactivó la Asociación de Padres, Maestros y Estudiantes. Según Jana Coelho, cuyo hijo asiste a Monarch, el director Cecil asistió a todas las reuniones del grupo menos a una, que coincidió con la fecha en que tuvo que llevar a su propio hijo a la universidad.

Por eso, cuando Coelho se enteró de que la Junta Escolar de Broward había destituido a Cecil del campus de Coconut Creek, se preguntó de inmediato: “¿Qué pudo haber hecho el señor Cecil?”.

“Cuantos más detalles escuchaba, más me enfadaba”, dijo al Miami Herald, explicando que admiraba a Cecil y no estaba de acuerdo con su reasignación. “Me sentí consternada. Me quedé sin palabras y muy disgustada”.

James Cecil, director de la Secundaria Monarch
James Cecil, director de la Secundaria Monarch

El distrito escolar lo reasignó, junto con otros cuatro empleados de Monarch el 27 de noviembre, por permitir supuestamente que una estudiante transgénero jugara en el equipo femenino de voleibol.

El martes, la Florida High School Athletic Association (FHSAA) respondió a las acusaciones, sancionando a la escuela con un año de libertad condicional administrativa y una multa de $16,500 por incumplir la “Ley de Equidad en los Deportes Femeninos”, que entró en vigor en 2021 y prohíbe a las chicas transgénero jugar en deportes femeninos, y un estatuto de la FHSAA que ordena lo mismo. (La sanción de la FHSAA no mencionaba consecuencias para los maestros reasignados).

La salida de los empleados ha causado desde entonces un grave trastorno en la secundaria, según miembros de la comunidad como Coelho.

Tal vez el ejemplo más claro de la perturbación fue la decisión de los estudiantes de organizar un paro pacífico de media hora en apoyo de los empleados y la estudiante en el centro del asunto menos de 24 horas después de la decisión del distrito de investigar a los empleados de la escuela por presunta infracción de la ley.

Tras extenderse por el campo de football, los estudiantes gritaron consignas como “Déjenla jugar”, “los derechos transgénero son derechos humanos” y “Liberen a Cecil ya”.

Al día siguiente, volvieron a salir.

Alumnos de la Secundaria Monarch llevan a cabo una huelga el martes 28 de noviembre de 2023, después de que el director, James Cecil, y otros miembros del personal fueran destituidos de sus cargos a la espera de una investigación. Las reasignaciones se produjeron porque una estudiante transgénero había estado jugando voleibol en la escuela en Coconut Creek, Florida.

Desde la perspectiva de Coelho, la noticia fue impactante. Cecil, en poco más de un año, había mejorado considerablemente la escuela, dijo. Impulsó la comunicación y la transparencia con los padres y se convirtió en una presencia positiva en la vida cotidiana de los alumnos.

A finales de noviembre, ella escribió una carta de tres páginas a Todd LaPace, director de escuelas intermedias y secundarias de la Oficina Regional Norte de BCPS, y a Debra Hixon, miembro de la Junta Escolar que representa al distrito de Monarch, pidiéndoles que “exoneraran totalmente” a los empleados. En ella, dijo que la terrible experiencia “está causando una gran cantidad de estrés para la mayoría de los estudiantes, el personal y los padres”.

‘Hace lo que es mejor’

Cecil comenzó su carrera en las escuelas públicas de Broward en agosto de 1998, después de graduarse de la Universidad de la Florida con una maestría en Educación.

Su primer empleo fue como maestro de Estudios Sociales en la escuela intermedia Ramblewood en Coral Springs, muestra su expediente de empleado. Permaneció en ese cargo seis años hasta agosto de 2004, cuando se trasladó a la escuela intermedia Margate como especialista en educación de estudiantes excepcionales durante un año.

En 2005, obtuvo su primer puesto como administrador cuando regresó a Ramblewood como subdirector, cargo que ocupó durante cuatro años. Luego fue dos años subdirector en la escuela intermedia Silverlakes en North Lauderdale y después, desde 2011 hasta 2022, fue director de la escuela intermedia Sawgrass Springs en Coral Springs.

Partes interesadas elogiaron su mandato y carácter en entrevistas con el Herald. (El Herald no pudo comunicarse con Cecil para este artículo. La política de la Junta Escolar prohíbe hablar sobre el tema a quienes están siendo investigados).

Anna Fusco, presidenta del Sindicato de Maestros de Broward, dijo que la ausencia de los administradores obstaculiza la capacidad de los estudiantes para salir adelante en la escuela. Los educadores hablan a menudo de la continuidad en el aprendizaje y de la importancia de la coherencia. La ausencia de Cecil, argumentó, es otra distracción que los estudiantes tendrán que manejar.

“Cuando estás tratando de pensar en tus estudios y hacer lo que tienes que hacer, pero tu mente está divagando, va a ser una distracción”, dijo Fusco.

Y los dos paros organizados por los estudiantes son una prueba más de ello, dijo.

“Demostró que están preocupados, que están estresados y que su escuela va a ser atendida”, dijo. “Es propio de la naturaleza humana (pensar en ello) cuando le ocurre algo a alguien a quien respetas”.

Jim Gard, un maestro de Monarch que ha trabajado con un puñado de directores en sus más de 40 años de enseñanza, se hizo eco de Fusco.

“Es un educador, y eso es muy importante. Se comunica bien, administra bien y está disponible todo el tiempo”, dijo Gard. Está bien informado, es fácil trabajar con él, se acerca a los chicos y a los maestros. Hace lo que es mejor” para todos.

Un estudiante de la escuela dijo al Herald que Cecil siempre estaba visible en la escuela. Tenía una cuenta de Instagram, donde promovía eventos en la escuela y “siempre se esforzaba por informar a los estudiantes sobre las actividades que se llevaban a cabo en la escuela”, dijo.

El Herald mantiene en reserva el nombre del estudiante porque temía hablar públicamente sobre el tema.

Los estudiantes también se sentían cómodos haciendo preguntas a Cecil sobre su trabajo o sobre la graduación, dijo. Ahora, dijo el estudiante, la ausencia de Cecil es notable. “Simplemente lo sientes (y) el ambiente se ha sentido un poco más vacío”.