Moreno Valle y la pelea pública que lo alejaría de Los Pinos
Para conquistar el poder o conservarlo algunos partidos están dispuestos a hacer alianzas “con el diablo” y eso es lo que algunos interpretan que hacen por estos días partidos como el PAN y el PRD, a los que algunos consideran el agua y el aceite que nunca se mezclan, obviamente en política todo puede suceder si le se pone el pegamento de la ambición.
Es un hecho que desde hace algunos meses, tanto el Partido Acción Nacional (PAN) como el Partido de la Revolución Democrática (PRD), entraron en crisis en sus liderazgos internos, casi de manera simultánea, a partir de que sus entonces dirigentes Gustavo Madero y Jesús Zambrano apoyaron la iniciativa del presidente Peña Nieto de llevar a cabo las reformas estructurales del Pacto por México.
Por mandato de sus estatutos ambos partidos, PAN y PRD, cambiaron a sus dirigencias, cada uno con su propio conflicto, que significó el incremento de su división interna y el surgimiento de dos nuevos liderazgos caracterizados por su propia debilidad estructural, ante una lucha por apoderarse del dominio del partido de parte de grupos que se sienten con más méritos.
La disputa por los partidos tiene como contexto inmediato el proceso electoral que está en proceso en 12 estados, en los que se renovarán las gubernaturas y de manera más lejana, las elecciones federales de 2018, en las que se llevará a cabo la sucesión presidencial.
La situación del PAN ha permitido que el gobernador de Puebla, Rafael Moreno Valle, busque incrementar su influencia interna como parte de su estrategia para alcanzar la candidatura de este partido a la presidencia en 2018.
Los nuevos liderazgos del PAN y PRD, depositados en Ricardo Anaya y Agustín Basave, respectivamente, plantearon la estrategia de aliarse para vencer en las urnas a su “archirrival” el PRI.
Hace seis años las alianzas entre PAN y PRD, en algunas entidades, los llevó al triunfo electoral, fue el caso de Sinaloa, Oaxaca y Puebla, por ello es recomendable repetir la experiencia. Es importante para ambos partidos ganar el mayor número de gubernaturas posible y, sobre todo, mantener las conquistadas actuales.
Pero no todos están dispuestos en el PAN y el PRD a volver a transitar por esa experiencia y le ponen diferentes obstáculos para que se concrete. Este es el caso del Gobernador Rafael Moreno Valle que siendo un interesado directo por alcanzar la candidatura del PAN a la presidencia en 2018, podría ver cómo se desmoronan sus expectativas.
El presidente del PRD Agustín Basave informó a la prensa que su partido no irá en alianza en Puebla con el PAN debido a que “desde hace más de tres meses, le solicitó al gobernador, Rafael Moreno Valle, la liberación de seis militantes que están detenidos por protestas sociales, y hasta el momento no ha cumplido el compromiso.”
También acusó al gobernador Moreno Valle de intentar entrometerse en los asuntos internos del PRD. Dijo Basave que recientemente “se celebró un Consejo Estatal del partido en Puebla, tengo testimonios, mensajes, llamadas de compañeros del CEN (acerca de) que fueron maltratados, que señalan o acusan al gobierno de Puebla de una intromisión o intento de injerencia en decisiones de nuestro partido.”
En su columna La Historia en Breve, el periodista Ciro Gómez Leyva (El Universal 27/01/2016) comenta: “En el PAN hay tres aspirantes a la candidatura presidencial. Uno es el gobernador de Puebla, Rafael Moreno Valle. Puebla tendrá elección de gobernador este año. Si el PAN pierde, Moreno Valle quedaría fuera de la competencia. Por eso, el 5 de junio él se juega una dura ronda eliminatoria camino a 2018.”
Es una realidad que para Moreno Valle ganar las elecciones en su estado es clave y que esa ruta, debe hacerla en alianza y por ello llama la atención la confrontación con el PRD que, dice Gómez Leyva, a los dirigentes del PRD “no les gusta Moreno Valle, se sienten agraviados por él, tiene encarcelados a “compañeros” por protestar (hay recuentos que marcan 231 casos en cinco años).
Hay una política represiva de su gobierno contra los movimientos sociales y no tiene política social, ni política agropecuaria ni interés en sacar propuestas legislativas de manera conjunta".
Aparentemente este rompimiento podría ser el principio del fin de los sueños de Moreno Valle por llegar a Los Pinos y es que en su loca carrera se le olvidó que lo importante no es llegar primero, sino saber llegar. No será extraño que en escenarios cercanos el “fuego amigo” desde el PAN empiece a disparar para favorecer a Margarita Zavala. Cosas de la ambición de poder.
Te puede interesar: