Familiares de detenidos por el ICE en California inician huelga de hambre

Los Ángeles, 30 sep (EFE News).- Un grupo de ocho familiares de inmigrantes detenidos en la cárcel de inmigración en Adelanto, California, iniciaron este miércoles una huelga de hambre frente a las instalaciones del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE) en Los Ángeles, advirtiendo que no se irán de allí hasta que sus esposos y padres sean liberados.

“Voy a dormir aquí y quedarme hasta que las autoridades dejen libre a mi esposo”, dijo a Efe con voz quebrada Leonor Gómez, una de las participantes de la huelga.

Gómez, una de las promotoras de la medida, está abogando por la libertad de su esposo, el pastor Hugo Rolando Gómez, de 61 años. El inmigrante guatemalteco, quien tenía más de 34 años residiendo en Estados Unidos y fue arrestado por las autoridades migratorias el año pasado, actualmente está aislado porque se contagió del coronavirus.

“Mi esposo está sufriendo mucho, no le quieren dar sino Tylenol y no quieren atenderlo ni ayudarle con su enfermedad”, denunció Gómez.

El caso del pastor guatemalteco es solo un ejemplo de la “crueldad” con la que el ICE estaría tratando a los migrantes bajo su custodia, advirtió a Efe el reverendo Guillermo Torres, miembro de Clérigos y Laicos Unidos por una Justicia Económica (CLUE), quienes apoyan la huelga.

Además de las personas en huelga que acampan frente a las oficinas del ICE, decenas de religiosos, activistas y familiares de los detenidos empezaron ayunos en sus casas.

“No todos pueden estar aquí por la pandemia de coronavirus, pero muchos están apoyando a estas madres, esposas e hijos en una lucha de meses para que se respete la vida y dignidad de estos inmigrantes”, recalcó Torres.

Activistas, abogados y los mismos internos han denunciado desde el comienzo de la pandemia los riesgos para la salud de los migrantes, y la poca atención sanitaria que reciben en estos centros. También se han escuchado quejas por el uso de fuertes químicos para desinfectar que, según las denuncias de los detenidos, están causándoles problemas de salud.

Este martes un juez federal en Los Ángeles ordenó al ICE la reducción inmediata de la población del centro de detención de Adelanto debido al brote de COVID-19 que se propaga por las instalaciones. De 784 inmigrantes alojados en el centro de detención de 1.940 camas, 81 dieron positivo por el coronavirus, incluidos nueve que requirieron hospitalización, según el fallo escrito del juez de distrito Terry Hatter.

En su registro actualizado al 28 de septiembre, el ICE asegura que actualamente 57 inmigrantes se encuentran lidiando con la enfermedad y están en aislamiento.

El fallo de Hatter hace parte de una batalla legal de meses por la seguridad de los inmigrantes detenidos en la instalación, que está operada por GEO Group, una empresa privada cuestionada por los activistas y líderes religiosos.

El magistrado subrayó que la anulación por parte de Gabriel Valdez, director asistente del ICE en Adelanto, de un plan anterior dado por la corte para evaluar a todos los detenidos fue "arbitraria e injustificada", reportó el diario Los Angeles Times.

Hatter dijo que la respuesta del Gobierno a la COVID-19 "sigue siendo inadecuada y objetivamente irrazonable".

“Los nervios de mi esposo están sufriendo mucho. Él tiene 61 años y es población de riesgo, no entiendo por qué no lo dejan pelear su caso en libertad”, señaló Leonor Gómez.

La huelga inicialmente está programada para cinco días pero los activistas y los participantes han dicho que no cesarán su lucha.

Gómez también hizo un llamado a la comunidad hispana que tiene estatus legal: “Salgan de sus trincheras, dejen su comodidad, tengan dolor por los que viven esta pesadilla y no pueden hablar; hablen por ellos”.

(c) Agencia EFE