¿Podría Alberto Fernández indultar a Cristina Kirchner?

La vicepresidenta Cristina Kichner junto al presidente Alberto Fernández
La vicepresidenta Cristina Kichner junto al presidente Alberto Fernández - Créditos: @Rodrigo Nespolo

12 años de prisión e inhabilitación especial perpetua para ejercer cargos públicos. Ese fue el pedido que los fiscales Diego Luciani y Sergio Mola realizaron contra la vicepresidenta Cristina Kirchner el lunes en el tramo final de su alegato en el juicio oral de la causa Vialidad, donde se encuentra acusada junto a exfuncionarios de sus gobiernos y al empresario patagónico Lázaro Báez por el direccionamiento de la obra pública en Santa Cruz.

La solicitud de los fiscales ante el Tribunal Oral Federal 2 fue repudiada rápidamente por referentes del kirchnerismo y por altos funcionarios del Gobierno, incluido el presidente Alberto Fernández, quien publicó un comunicado en apoyo a la exmandataria en el que denunció una “persecución judicial y mediática” en su contra. Esa apreciación reavivó el interrogante en torno a la facultad que el jefe de Estado detenta para indultar a su compañera de fórmula ante una eventual condena.

Este miércoles, además, el exjuez de la Corte Suprema, Eugenio Zaffaroni, fue un paso más adelante y habló de esta herramienta como la única salida posible ante una condena firme contra la expresidenta. En una columna en AM 750, afirmó: “Si lo que preveo se cumple, si la vicepresidenta es condenada, si quienes deben anular este proceso viciado desde el inicio lo confirmasen, o nada hiciesen, dados los tiempos del derecho internacional, resultarían ineficaces los recursos ante los organismos internacionales. No quedaría otra alternativa que buscar una solución en el derecho interno para salvar el futuro de nuestra democracia ante la perspectiva de llegar a una elección con proscripciones”.

Tras introducir el concepto, figura de la que el propio Fernández dijo antes de llegar al Gobierno que no pensaba hacer uso, el exmagistrado y aliado del kirchnerismo insistió: “El único recurso que queda, por duro que sea, no puede ser otro que un indulto presidencial. Es conveniente que lo vayamos pensando como último recurso para que la democracia preservada pueda intentar la restauración de la República”.

¿Qué es un indulto?

En una reciente entrevista con LA NACION, el abogado constitucionalista Andrés Gil Domínguez definió la medida de la siguiente forma: “Es una facultad que tienen el Presidente o los gobernadores para extinguir o perdonar la pena respecto de una persona que ha sido condenada en un proceso penal”. En el orden federal, como es el caso de la causa Vialidad, el otorgamiento del indulto es potestad del Presidente de la Nación; en tanto, en el ámbito provincial quienes los aplican son los gobernadores, y en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, el Jefe de Gobierno.

Sin embargo, Juan Vicente Sola, profesor titular de Derechos Constitucional de la Universidad de Buenos Aires (UBA), hizo una aclaración, en diálogo con este medio: “El indulto borra la pena, pero no la culpabilidad, a diferencia de la amnistía, que borra el delito”.

Con relación al momento de utilización de esta facultad, la jurisprudencia indica -según Sola- que no es necesaria una condena firme para que se pueda aplicar un indulto. De esta forma, la medida puede proceder ante una eventual sentencia condenatoria en primera instancia -escenario que podría darse en los próximos meses- o antes del pronunciamiento de la Justicia, en el caso de los procesados.

Sobre la posibilidad de una rápida aplicación del indulto en el marco de un proceso penal, Sola planteó que el sentido de tal decisión sería el de “no continuar con una investigación, que es costosa, cuando ya hay una decisión tomada de hacerlo posteriormente”. ”También puede proceder cuando la persona es necesaria para alguna actividad pública, pero siempre es una excepción”, señaló y agregó que la lógica dicta su aplicación “para alguien que está condenado”. “Si no lo está, presupone que es inocente”, subrayó.

En la misma línea, el constitucionalista Daniel Sabsay consideró ante la consulta de LA NACION: “Rotundamente, el haber indultado a procesados es una locura. ¿De qué pena se los indulta si todavía no hay pena? Esa es una jurisprudencia de la Corte [Suprema de Justicia] de la época de [Carlos] Menem, que estoy convencido que no ratificaría la Corte actual”.

¿Podría Alberto Fernández indultar a Cristina Kirchner?

En rigor, Alberto Fernández se encuentra en condiciones de indultar a Cristina Kirchner. Sin embargo, los constitucionalistas consultados por este medio advierten que esta facultad no procedería en casos de corrupción grave como el que se encuentra en análisis.

Según Gil Domínguez, el indulto se puede aplicar en la Argentina “siempre y cuando se trate de delitos comunes que no sean delitos de corrupción”. Tampoco en casos de crímenes de guerra o de lesa humanidad.

Por su parte, Sabsay indicó: “Hoy -y ya hay una sentencia de la Cámara Federal de La Plata y de una de las salas de Casación Penal- se considera que el delito de corrupción, por el lugar donde está ubicado en el Artículo 36 [de la CN], y que se lo asimila a traición a la patria, es inindultable, inamnistiable e imprescriptible. Todavía no hay sentencia de la Corte, pero digamos que esa es la dirección el a cual nuestra jurisprudencia se está dirigiendo”.

En sintonía, Sola manifestó que aunque el Presidente “formalmente podría” indultar a Cristina Kirchner, sería posible que esto no prosperase por el tipo de delito en análisis. “Al no haber antecedentes -a diferencia de lo ocurrido en casos de crímenes de lesa humanidad-, hoy la aplicación del indulto en casos de corrupción es objeto de debate”, indicó y planteó un escenario posible: “Se plantea un dilema. Si yo indulto durante el proceso, no se sabría si [la vicepresidenta] es culpable de corrupción. Eso podría pasar. Pero indultar quiere decir que se reconocen los hechos cometidos. No es una declaración de inocencia ¿Es eso lo que querría Cristina Kirchner o una sentencia absolutoria? No lo sé”.

Por último, dijo que de probarse que se trata de un “grave caso de corrupción podría abrirse una instancia judicial” para revertir un eventual indulto, que no procedería frente a esa clase de faltas.

Lo cierto es que antes de asumir la presidencia, Fernández descartó que vaya a tomar una decisión semejante respecto de su vicepresidenta. “El que piensa que voy a llegar a la Casa Rosada para dar un indulto es un estúpido, yo descreo del indulto. Los presidentes no están para perdonar a nadie”, sostuvo.