Adolescentes encuentran cadáver flotando mientras exploraban una caverna sumergida en Florida

Los cadáveres de dos buzos se encontraron en una caverna sumergida de la Florida, después que tres adolescentes alertaron a las autoridades haber descubierto a un hombre flotando bocabajo en el agua, según la policía del Condado Hernando.

Los investigadores identificaron a los buzos como Todd Richard McKenna, de 52 años, y Stephen Roderick Gambrell, de 63 años.

“Ninguno de los dos tenía señales evidentes de traumatismo, y ambos parecían tener el equipo de buceo apropiado”, dijo la policía.

“En estos momentos se desconoce si todos los equipos trabajaban de la forma apropiada. Las dos victimas fueron llevadas al Departamento de Medicina Forense”.

Un vehículo que se cree era de los buzos se encontró cerca de la cueva, que se identificó como la Caverna Buford Springs, ubicada en el Parque de Vida Silvestre Chassahowitzka. El lugar está a unas 55 millas al norte de Tampa, en el área Weeki Wachee.

De acuerdo con los investigadores del caso, a las 12:20 p.m. del miércoles, 22 de junio, uno de los jóvenes hizo una llamada al 911, tras decir que vieron a los buzos entrar en la cueva a las 11 a.m.

Los buzos salieron a la superficie, y luego regresaron a la caverna, a pesar de que uno se quejó que podría tener un escape en el tanque de oxígeno, le dijeron los chicos a las autoridades.

“Poco después, los muchachos vieron a uno de los buzos subir a la superficie. El buzo flotaba bocabajo, pero ellos pensaron que lo hacía a propósito, para ver al otro buzo que aún no había subido a la superficie”, dijo la policía.

Posteriormente dos agentes que llegaron al lugar como respuesta a la llamada al 911, confirmaron que el buzo estaba muerto. Luego esperaron a que el otro buzo subiera.

“Cuando pasó el tiempo y el buzo no subió a la superficie, se supuso que lo más probable era que hubiera tenido algún tipo de problema en la cueva”, dijo la policía.

“Varios miembros del Departamento de Rescate y Recuperación Internacional de Cavernas Sumergidas (IUCRR) acudieron al sitio, e intentaron una misión de recuperación del segundo buzo. Los hombres hallaron al buzo a aproximadamente 137 pies de profundidad. Una vez determinaron que estaba muerto, fue llevado a la superficie”.

En la actualidad se lleva a cabo una investigación de lo ocurrido.

Ambos hombres murieron en una caverna de agua de manantial que está a 150 pies de profundidad y se considera “uno de los lugares de buceo más bellos de la Florida”, reporta la Guía de la Florida.

Sin embargo, la caverna solo se recomienda ser explorada por buzos expertos, ya que tiene un área para nadar muy pequeña, a la que “es difícil de llegar, y posiblemente sea peligrosa”, observa la guía.

Traducción de Jorge Posada