Administrador municipal dice que Miami pondrá fin a relación con empresa de muebles de su esposa

El administrador municipal de Miami, Art Noriega, dijo el viernes al Miami Herald que la ciudad en su conjunto está poniendo fin a su relación con Pradere Manufacturing, una empresa de muebles que emplea a su esposa y es propiedad de los padres de ella.

Durante la reunión de la comisión del jueves, Noriega anunció que su propia oficina dejaría de comprar a Pradere. Fue una presentación que llegó casi tres meses después de que dijera que refutaría las acusaciones sobre un conflicto de interés en relación con las compras a Pradere realizadas por su oficina y otros departamentos de la ciudad.

En el debate sobre la presentación del administrador, el comisionado Manolo Reyes dijo que todo el gobierno de la ciudad debería dejar de hacer negocios con Pradere mientras Noriega sea administrador municipal.

El viernes, Noriega dijo al Herald que la ciudad no comprará a Pradere mientras él sea el administrador municipal. El administrador municipal es el máximo responsable administrativo de una fuerza laboral municipal de más de 4,000 empleados.

A la pregunta de si había un memorando que documentara oficialmente el cambio de política, Noriega dijo que el departamento de adquisiciones, que compra bienes en nombre del gobierno de la ciudad, es consciente de la medida.

“El comsionado Reyes hizo referencia a ello en la reunión y yo lo reconocí”, dijo Noriega. “No solo lo sabe el personal, sino que Pradere no responderá a preguntas hasta que yo deje de ser administrador municipal”.

El comisionado Miguel Angel Gabela dijo al Herald que el administrador municipal le confirmó el mismo cambio el viernes por la mañana en una llamada telefónica.

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Noriega estuvo bajo escrutinio público en enero, después de que WLRN, socio de noticias del Miami Herald, informara que desde que Noriega se convirtió en administrador en 2020, la ciudad había gastado más de $440,000 con Pradere Manufacturing.

Cuando comenzó en el puesto, Noriega no buscó una opinión ética de la Comisión de Ética y Confianza Pública de Miami-Dade. En su lugar, escribió un memorando enviado al alcalde y a los comisionados en abril de 2020 revelando que su esposa era la directora de operaciones de Pradere, “una empresa que ha hecho negocios con la ciudad desde 2008”.

El asunto está siendo objeto de una investigación preliminar por parte de la Comisión de Ética, según confirmó una fuente al Herald.