Adebayo y Lowry salen a eliminar el efecto Embiid en el Juego 4 del Heat en Filadelfia

Después de la dura derrota 99-79 en su primer juego en Filadelfia, el Heat se prepara para llevarse el triunfo en el segundo, en el Juego 4 de la serie de semifinales ante los Sixers, este domingo 8 de mayo (8 p.m. TV: TNT y Radio: 98.3 FM) en el Wells Fargo Center, que evidentemente no es el FTX Arena.

Lo mejor es que peor no pueden jugar, ya que en el Juego 3, marcado por el regreso del centro de Filadelfia Joel Embiid, el equipo de Miami tuvo una raquítica ofensiva con apenas un 35.1 por ciento en tiros de campo (23.3% en triples), que no debe repetir.

Los Sixers con Embiid (18 puntos y 11 rebotes) fueron un mejor equipo y con su primera victoria pusieron 2-1 la serie, pero no es para sacar 20 puntos y ni dejar al Heat por debajo de 79 puntos tras un miserable último cuarto en el que Miami cayó 31-14, después de haberse acercado a solo tres puntos.

“Esto es lo que tienes que esperar”, dijo el entrenador del Heat, Erik Spoelstra. “Es un jugador con calibre de MVP”.

Bam Adebayo no estuvo a su nivel con tan solo nueve puntos, tres rebotes y un -22 impropio de su estirpe. Seguramente el centro de Miami habrá tomado nota de eso para salir con todo en este segundo juego ante Filadelfia ante Embiid.

También habrá tomado nota Kyle Lowry, tras su nefasto regreso de una lesión en los isquiotibiales. El estelar armador no estuvo bien con cero puntos y tres asistencias en 25 minutos; los mismos puntos (0) que su suplente Gabe Vicent y esto lógicamente no es normal.

Realmente en defensa Miami no estuvo mal limitando a su rival a menos de 100 puntos, pese a que Danny Green tuvo su noche con siete triples, los cuales marcaron la diferencia; pero lo peor del Heat fue su ofensiva a la que también hay que darle mérito al quinteto de Filadelfia.

Lo mejor para los aficionados del Heat no es que solo es una derrota, sino que habrá Juego 5 el próximo martes en el FTX Arena. Lo esperado por ellos es que la serie regrese a la Capital del Sol con 3-1 para finiquitarla en casa, de ahí la importancia de este Juego 4 en el que los 76ers con el enmascarado Embiid esperan igualar 2-2 la serie.

Al Miami no le alcanzaron los 33 puntos de Jimmy Butler, en el quinteto titular, ni los 14 de Tyler Herro, con la segunda unidad, pues el resto no llegó a los 10 puntos. Así no se puede.

Seguramente Spoelstra revisó la película y vio en lo que falló el equipo, pero igualmente habrá que mover mejor el balón y hacer más jugadas, después de que el Heat tirara más y peor.

No se vislumbra que Spoelstra de entrada a Duncan Robinson, relegado en estos playoffs en favor de Max Struss y y Victor Oladipo, luego de su colapso ofensivo tras ser el mejor en el Juego 1; viniendo desde el banco, aunque tampoco se descarta. Sus triples no le verían nada mal al Heat que necesita ahora un tirador de confianza.

En verdad el efecto Embiid fue clave para los Sixers, principalmente desde el punto de vista motivacional y cómo este se involucra en el juego, pero tampoco fue el monstruo de la temporada regular. Tal vez en lo que más influyó aparte de su defensa fue en atraer la marca y propiciar que Green se quedara más desmarcado para ajusticiar con sus tres.

“Agregas a Jo [Joel Embiid] a cualquier equipo, en casa o fuera y el juego cambia drásticamente”, dijo Butler. “Ha sido así durante toda su carrera”.

De modo que se espera un cuarto juego mucho más cerrado, con el Heat enrabietado por su mala actuación en el choque anterior, buscando contra viento y marea ganar su séptimo encuentro, que le ponga a un paso de las finales de conferencia.