Acusación de trampa en prueba de ascenso de bomberos empaña al departamento
Un examen para uno de los puestos más altos del Departamento de Bomberos de Hialeah está bajo escrutinio, lo que provocó una investigación de Asuntos Internos después de que uno de los candidatos que reprobó el examen se quejó de que otro candidato hizo trampa.
La queja surgió después de que se administrara el examen en agosto de 2023. Una prueba que cualquier persona que busque un ascenso a jefe de batallón o subjefe de operaciones debe aprobar.
El jefe de bomberos de distrito, Robert Ortega, presentó una denuncia ante la Oficina de Cumplimiento Profesional del Departamento de Policía de Hialeah dos meses después. Ortega, uno de los seis candidatos que realizó la prueba, fue uno de los tres que la reprobó.
El examen consta de componentes escritos y orales, cada uno de los cuales requiere una puntuación mínima de 70 sobre 100 para aprobar.
En una declaración jurada ante la unidad de Asuntos Internos del departamento de policía, Ortega dijo que “a un empleado en particular se le dieron las respuestas del examen oral para obtener una puntuación excepcional”. Aunque Ortega no mencionó al candidato por su nombre, en su denuncia original sí identificó a la persona que creía que “recibió una ventaja injusta” como aquella que obtuvo 100 puntos en la prueba.
El único candidato que obtuvo una puntuación perfecta en el examen fue Edward Altidor, jefe de la división de Estándares Profesionales del departamento.
“Alguien más le dio a Altidor una ventaja injusta sobre los otros candidatos, y eso no es ético”, dijo Ortega a el Nuevo Herald, quien aseguró que los jefes de división como Altidor tienen una ventaja injusta en los ascensos.
“Tienen palanca”, dijo Ortega, un término del argot para designar a los benefactores de alto rango.
En su declaración a Asuntos Internos, Ortega también se quejó de que las preguntas del examen oral no se alineaban con el material de estudio descrito en el Manual de Estándares Profesionales del Departamento de Bomberos de Hialeah. Otro jefe de bomberos del distrito, Vladimir Kanarev, quien tampoco aprobó el examen, confirmó las afirmaciones de Ortega en su propia declaración a Asuntos Internos, diciendo que el material de estudio no era consistente con la parte oral del examen.
Ortega criticó al liderazgo del cuerpo de bomberos, diciendo que “crearon una prueba de Frankenstein” que favorecía a ciertos aspirantes, señalando que el 50% de los candidatos reprobaron porque la prueba no se alineaba con el material de estudio.
También se quejó de que “hay una cuestión cultural” en el departamento en la que los altos funcionarios reciben ayuda cuando hacen exámenes de ascenso. Ellos “no abren un libro y obtienen una puntuación perfecta”, añadió.
Altidor se negó a hacer comentarios para este artículo y refirió al periodista contactar a su abogado, Naomi Levi García. “Él no hizo trampa y no tuvo una ventaja injusta”, dijo García al Herald en un comunicado.
Después de que Asuntos Internos cerrara su investigación el 27 de agosto de este año, la directora de Recursos Humanos de Hialeah, Elsa Jaramillo-Velez, pidió a los miembros de la junta de personal de la ciudad que descartaran la lista de elegibilidad de los resultados del examen del año pasado.
La junta de personal está considerando al menos tres opciones: descartar la lista de elegibilidad y rehacer el examen oral; descartar los resultados de todo el examen, o mantener la lista de elegibilidad actual, lo que permitiría a los candidatos que aprobaron el controvertido examen ser elegibles para el puesto cuando surja una vacante.
La junta aún tiene que tomar una decisión y dijo que está esperando la opinión del jefe de bomberos William Guerra.
La abogado de Altidor argumentó que no existe ninguna razón legítima para invalidar el listado de promoción.
La lista de personas que han aprobado el examen es importante, especialmente en este momento, porque existen varias vacantes que podrían generar una posición dentro de la jefatura de batallón, incluido el de subjefe de bomberos. El propio Guerra planea jubilarse en mayo, lo que abrirá otras posiciones de liderazgo.
Los exámenes de jefe de batallón fueron creados por el subjefe de bomberos Raymond Malin, dijo Guerra a la investigación de Asuntos Internos. Malin se retiró poco después de que Asuntos Internos lo entrevistara sobre la acusación de trampa. No respondió a una solicitud de comentarios del Herald.
Según la investigación de Asuntos Internos, un tercer candidato que también reprobó la prueba, el jefe de división Emmanuel Louis, recibió una copia del examen oral de años anteriores antes de la prueba.
El departamento de Recursos Humanos dijo a los funcionarios de la ciudad que le habían dado a Louis la copia del examen anterior porque “él era el contacto designado por el Departamento de Bomberos con respecto a los exámenes”. Si bien el examen que recibió Louis no fue idéntico al que realizaron posteriormente los seis candidatos, la directora de Recursos Humanos, Jaramillo-Velez, lo describió como “muy similar”.
Jaramillo-Velez descubrió correos electrónicos que indicaban que Louis había enviado una copia del examen oral a Altidor antes de que tomaran el examen, según la investigación de Asuntos Internos.
En una reunión de la junta de personal el mes pasado, Louis negó haber actuado mal. “Reprobé la parte oral de ese examen, por lo que insinuar que hubo algunos tipos de trampa”, dijo, es “absurdo e irrespetuoso”.
Guerra, el jefe de bomberos, dijo al Herald que tomará una decisión pronto pero no especificó sí se volverá a hacer el examen.
El sindicato de bomberos de la ciudad le dijo al Herald que la investigación mostró que había “una ventaja injusta” en la administración del examen y que el jefe debe tomar medidas disciplinarias, que podrían incluir el despido de empleados y la eliminación de candidatos de la lista de ascensos.
Algunos miembros del departamento, incluidos oficiales de alto rango que pidieron no ser identificados, dijeron al Herald que sienten que el jefe ha mostrado favoritismo hacia Altidor en el pasado, incluso sacándolo de sus tareas diarias de extinción de incendios y nombrándolo jefe del departamento de división de estándares profesionales.
Guerra negó haber mostrado favoritismo por Altidor.
“¿Cómo puede alguien decir eso?” dijo el jefe. “No es cierto”.