Activistas acusan a Siria de ataques químicos en Alepo
NACIONES UNIDAS (AP) — El grupo de derechos humanos Human Rights Watch acusó el lunes a Siria de perpetrar por lo menos ocho ataques con gas cloro contra zonas controladas por las fuerzas opositoras en los últimos meses de la batalla por Alepo.
En un reporte difundido el lunes, HRW dijo que en base a videos y entrevistas con testigos, determinó que helicópteros de las fuerzas oficialistas lanzaron el gas contra el sector oriental de la ciudad. Por lo menos nueve civiles murieron, entre ellos cuatro niños y 200 resultaron heridos, dijo a agrupación.
Los ataques ocurrieron en líneas de vanguardia, donde las fuerzas oficialistas preparaban una ofensiva moviéndose de este al oeste, agregó HRW.
"La manera como se fue lanzado el gas revela que se trató de una maniobra coordinada con las fuerzas armadas en general, con la estrategia deliberada de reconquistar Alepo y no fue simplemente la tarea de unos militares aislados", afirmó el subdirector de casos de emergencia de la agrupación, Ole Solvang.
Anteriormente el gobierno sirio ha negado que haya usado armas químicas en el conflicto.
Human Rights Watch sostuvo que los ataques ocurrieron entre el 17 de noviembre y el 13 de diciembre, dos días antes de que las fuerzas del presidente Bashar Assad tomaron la ciudad y asestaron un duro golpe a los combatientes que tratan de derrocarlo.
En cinco de los ataques químicos, dijo el grupo, se pudieron examinar fotografías o videos de municiones llenas de sustancias tóxicas ya sea colocadas en internet o compartidas con Human Rights Watch. En los cinco casos, se veía claramente los cilindros de gas amarillos, incluso uno todavía tenía la etiqueta advirtiendo del contenido tóxico.
Según Human Rights Watch, grupos opositores, cuerpos de rescate, activistas y periodistas reportaron que las fuerzas oficialistas sirias han perpetrado ataques con armas químicas en otras partes de Siria.
Aunque el cloro tiene muchos usos civiles, la Convención sobre Armas Químicas firmada en 1993 y a la que Siria se sumó en octubre de 2013, prohíbe el uso de toda sustancia química tóxica para fines bélicos.