El sacrificio de 40 obreros que se encerraron por un mes en una fábrica de EEUU para ayudar en la lucha contra el COVID-19

La disponibilidad de materiales básicos para enfrentar en los hospitales la epidemia de COVID-10 es una cuestión crucial, en muchos casos de vida y muerte. Y muchos de esos insumos de importancia crítica, como las máscaras N95 y las batas utilizadas para la protección de los profesionales médicos, son muy escasos.

Obtener esos elementos ha sido una tarea ardua y costosa en todo el mundo, y producirlos en cantidades suficientes para atender esa necesidad no ha sido tarea simple.

Es allí donde el ejemplo de 40 trabajadores de una planta manufacturera en Pennsylvania ha cobrado enorme magnitud.

Algunos de los 40 obreros de Braskem America que pasaron 28 días trabajando sin volver a casa en una planta en Pennsylvania para fabricar sin parar material para máscaras y batas necesarias para profesionales de salud que luchan contra el Covid-19. (Captura de video / WPVI-6abc)
Algunos de los 40 obreros de Braskem America que pasaron 28 días trabajando sin volver a casa en una planta en Pennsylvania para fabricar sin parar material para máscaras y batas necesarias para profesionales de salud que luchan contra el Covid-19. (Captura de video / WPVI-6abc)

De acuerdo a la televisora local WPVI, un grupo de 40 obreros de la planta Braskem America decidió por unanimidad residir dentro de esa fábrica, sin regresar a sus hogares y sus familias, para trabajar continuamente en turnos de 12 horas. Durante 28 días esos trabajadores lo hicieron, comiendo y durmiendo en las instalaciones.

Salvo breves visitas a la planta de sus familiares, a los que los obreros solo pudieron ver a distancia, su aislamiento dentro de la fábrica fue casi total.

El objetivo era simple pero de importancia enorme: producir sin parar polipropileno, material para producir máscaras N95 y batas para los trabajadores médicos que atienden enfermos en la primera línea de batalla contra la epidemia de COVID-19.

La muy alta demanda de ese material, indicó American Web Media, impulsó la decisión de esos trabajadores de concentrarse totalmente en su producción, aunque eso implicara literalmente vivir aislados durante cuatro semanas en la fábrica.

“Ha habido un brillo en los ojos de todos”, dijo a la citada televisora Joe Boyce, uno de los supervisores de turno de esa planta en relación a la dedicación de esos 40 trabajadores.

El aislamiento de esos obreros ha sido diferente al que experimentan en sus hogares millones de personas alrededor del mundo durante la pandemia. No solo porque producen un material muy necesario sino porque durante ese periodo “hemos sido casi los más afortunados en los últimos 28 días, porque yo no he tenido que mantener separación de seis pies de otra persona ni he tenido que usar una máscara”, dijo Boyce.

Pero el riesgo de trabajar continuamente durante por muchos días no es poco, tanto por el desgaste físico y mental implícito, como porque los riesgos industriales en sí, presentes en toda fábrica, se incrementan en gran proporción.

El momento en que algunos de los 40 obreros de la planta de Braskem America en Pennsylvania checan su salida tras pasar 28 días continuos fabricando material para máscaras y batas necesarias para profesionales de salud que luchan contra el Covid-19. (Captura de video / WPVI-6abc)
El momento en que algunos de los 40 obreros de la planta de Braskem America en Pennsylvania checan su salida tras pasar 28 días continuos fabricando material para máscaras y batas necesarias para profesionales de salud que luchan contra el Covid-19. (Captura de video / WPVI-6abc)

Pero ciertamente eso permitió a Braskem America generar un flujo de polipropileno considerable y constante para la producción de insumos médicos que no habría sido posible sin el firme compromiso de esos trabajadores.

Al final, el trabajo continuo durante casi un mes de los 40 obreros de Braskem America ha dado buen fruto y ellos sienten satisfacción por su aportación. “Estamos realmente honrados de aportar y ayudar a personas que nunca conoceremos… A todo el personal de respuesta de emergencia, a todas las personas en la primera línea, les agradecemos. Eso hace nuestro trabajo más fácil de hacer”, añadió Boyce.

Una vez cumplidos los 28 días, los 40 trabajadores se han reunido ya con sus familias, han recibido una semana de descanso antes de volver a sus actividades normales y se les ha incrementado el salario, aunque no se ha especificado cuánto.

La enorme cantidad de máscaras y batas que se habrán fabricado con el material producido por esos 40 trabajadores y los miles de profesionales de salud y otras tareas esenciales que gracias a ello se protegieron del coronavirus son el mejor saldo de su esfuerzo.