20 confesiones verdaderas de los profesores

20 confesiones verdaderas de los profesores

Rachel Bertsche
Redactora

El regreso a la escuela está a la vuelta de la esquina, y sería agradable pensar que todos los profesores están encantados por comenzar otro año en el que moldearán las mentes jóvenes. Sin duda, algunos de ellos lo están, pero, tal y como muestran estas sinceras revelaciones de los profesores, otros vacilan tanto como sus estudiantes ante la idea de tener que regresar al frente del aula.

¿Qué piensan los profesores realmente de sus estudiantes - las chicas populares, los solitarios, las parejas adorables? Estos 20 profesores develaron sus verdaderas opiniones sobre el colegio, los estudiantes y sus colegas en Whisper, una aplicación para compartir de manera secreta tus reflexiones, una salida más barata que la terapia, ya que es gratis, para darle rienda suelta a lo que piensas con completa sinceridad.

  • “Soy profesor y la peor manera en la que podría decepcionar a mis estudiantes es si no logro transmitirles cuánto me preocupo por ellos. Eso me preocupa más que cualquier otra cosa que enseño”.

  • “Como profesor, me resulta difícil ser bueno con las chicas populares porque las odiaba cuando iba a la escuela…”.

  • “Soy profesor. Pero cuando el director dice que quiere verme, mi primer pensamiento es: ¿Qué hice? ¿Qué habré hecho mal?”.

  • “A veces no puedo creer cuan estúpidos son algunos de mis estudiantes”.

  • “Como profesor, no debería tener estudiantes favoritos, pero los tengo”.

  • “Como profesor, a menudo me convierto en una especie de Cupido para mis estudiantes, cuando los asigno en pareja para los proyectos”.

  • “Como profesor, mi alegría es devolverles los niños a sus padres al final del día…”.

  • “Como profesor, nunca permito que mis estudiantes formen sus propios grupos de laboratorio. Siempre hay un niño que no es invitado a entrar en el grupo y eso me rompe el corazón”.

  • “Soy profesor de un parvulario. Me gusta predecir el futuro de mis estudiantes basándome en su apariencia y comportamiento”.

  • “Como profesor, me motivan mucho más las vacaciones de verano que a mis estudiantes. Eso seguro”.

  • “Soy profesor y sé que debería sentirme agradecido por estar de vacaciones pero estoy aburrido. Quiero volver a la escuela”.

  • “Me pongo nervioso cuando se acerca la hora de volver a la escuela… ¡Y yo soy el profesor!”.

  • “Como profesor, desearía no tener que ser políticamente correcto, y decirle a los padres exactamente lo que pienso”.

  • “Como profesor, temo volver al trabajo. Amo a los niños pero no las escenas dramáticas que hacen los adultos”.

  • “Soy profesor y siempre que me equivoco y un estudiante me corrige, encuentro la forma de castigarlo sin quedar en evidencia”.

  • “Como profesor puedo afirmar con seguridad que, en efecto, nosotros los profesores hablamos mucho de nuestros hijos en clase”.

  • “Soy profesor y me complace ser severo cuando un estudiante no me cae bien”.

  • “Soy profesor y cuando dos estudiantes se odian, los hago trabajar juntos”.

  • “Soy profesor y me fascina lograr que la clase se avergüence cuando hablo sobre sus ‘relaciones secretas’”.

  • “Soy un profesor y cuando tengo un mal día antes de llegar al colegio, mis estudiantes me levantan el ánimo. Por eso enseño”.

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