Al menos 25 muertos en un naufragio de migrantes frente a Mauritania

Los cadáveres de unos migrantes fallecidos en el naufragio ante la costa de Mauritania permanecen cubiertos por un plástico, el 24 de julio de 2024 en una playa próxima a Nuakchott (Med Lemin Rajel)
Los cadáveres de unos migrantes fallecidos en el naufragio ante la costa de Mauritania permanecen cubiertos por un plástico, el 24 de julio de 2024 en una playa próxima a Nuakchott (Med Lemin Rajel)

Al menos 25 personas murieron en un naufragio el lunes de una embarcación abarrotada de migrantes frente a las costas de la capital de Mauritania,indicó el miércoles la agencia informativa oficial de este país del oeste de África.

La guardia costera mauritana "salvó la vida de 103 migrantes ilegales y recuperó 25 cadáveres, tras el hundimiento de su embarcación" frente a la costa de Nuakchott, señaló la agencia AMI, citando a un comandante regional.

Un balance anterior, de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), daba parte de 15 muertos y de decenas de desaparecidos.

De acuerdo a los datos de la guardia costera, entre las personas identificadas, fallecidas o rescatadas, figuran 65 senegaleses --entre ellos seis mujeres y tres niños--, 52 gambianos --entre ellos tres mujeres y tres niños-- y un marfileño.

Según la OIM, unas 300 personas subieron a bordo de una piragua en Gambia y pasaron siete días en el mar antes de que la embarcación naufragara cerca de Nuakchott el 22 de julio. En total, 120 personas fueron rescatadas, según el comunicado.

Entre los supervivientes, 10 personas fueron hospitalizadas y cuatro menores no acompañados y separados de sus familias durante el naufragio fueron identificados, añadió la organización.

Un alto funcionario de la guardia costera mauritana afirmó a AFP, bajo anonimato, que en la piragua viajaban entre 140 y 180 personas, en su mayoría senegaleses y gambianos. La embarcación se partió en medio del mar y el capitán se dio a la fuga, agregó.

- Destino: las islas Canarias -

Es la última catástrofe de este tipo en la ruta migratoria del Atlántico, cuyo principal destino son las islas Canarias, un archipiélago español próximo al noroeste de África y puerta de entrada a la Unión Europea.

A principios de julio, cerca de 90 migrantes fallecieron en un naufragio frente al litoral suroccidental de Mauritania en su travesía hacia Europa y decenas de personas nunca fueron halladas.

Un gran número de africanos huyen de la pobreza, el desempleo y la ausencia de perspectivas económicas y emprenden esta peligrosa ruta migratoria. A cambio de grandes sumas de dinero, embarcan clandestinamente en piraguas o barcos precarios que pueden transportar a decenas de pasajeros.

Se necesitan varios días de navegación para recorrer los cientos de kilómetros que separan las costas africanas de las Canarias, en terribles condiciones, según explican los supervivientes, a merced del hambre y la sed, los temporales y las averías.

Más de 19.700 migrantes han llegado de forma ilegal a las Canarias a través de esta ruta entre el 1 de enero y el 15 de julio de 2024, un aumento de 160% en comparación con el mismo periodo de 2023, cuando se registraron 7.590 migrantes, según datos de la OIM.

Otras travesías desde la zona subsahariana de África hacia Europa pasan por el interior de África, cruzando el desierto del Sáhara en dirección a las costas del Mediterráneo.

Más de 5.000 migrantes han fallecido en los cinco primeros meses de 2024 en su intento de llegar a las costas españolas, la mayoría por la ruta de las Canarias, indica la oenegé española Caminando Fronteras.

En mayo, al menos 26 migrantes que partieron de Guinea murieron frente a las costas de Senegal. Otras 26 perdieron la vida en febrero, también frente al litoral senegalés.

Pero estas cifras están lejos de reflejar la envergadura de los hechos, puesto que el número de pasajeros que parte es difícil de determinar.

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