Unas 1000 personas varadas: la fuerte advertencia meteorológica para la alta montaña mendocina
MENDOZA.- El creciente interés por cruzar la Cordillera de los Andes para hacer compras más baratas en Chile también se ha convertido en un dolor de cabeza para los viajeros, en medio de las inclemencias del tiempo en la alta montaña. Es que cada vez más personas deciden arriesgarse a conducir hasta el país limítrofe cuando las condiciones meteorológicas no son las mejores. En este caso, durante el fin de semana, a raíz de los pronósticos de nevadas, se dispuso el cierre preventivo del Sistema Integrado Cristo Redentor, lo que complicó el regreso de una importante cantidad de mendocinos que habían alcanzado a pasar.
Así, de acuerdo con datos de la Coordinación de Frontera a los que accedió LA NACIÓN, más de 1000 personas que cruzaron el pasado viernes, antes de la interrupción del paso internacional, que se hizo efectiva el sábado, tuvieron que quedarse en Chile. Es más, hubo quienes, desesperados, llegaron hasta la aduana pero no los dejaron pasar, y denunciaron que se les dio prioridad al transporte de carga. Así terminaron varados en la zona chilena de Guardia Vieja.
En algunos casos, ante la necesidad imperiosa de volver a la Argentina, en las últimas horas, se está registrando un movimiento inusual en el paso de Pino Achado, en Neuquén, de 9 a 18, aunque las condiciones meteorológicas en esa región también son adversas. Por eso, hay quienes aguardarán la reapertura en la frontera mendocina. De todos modos, las proyecciones oficiales indican que recién el viernes podría reanudarse el tránsito binacional en la provincia.
“Está muy complicado el escenario en la montaña. Hay que ver día a día qué pasa. Se esperan nevadas pesadas incluso el jueves. Por eso, entre los organismos de Vialidad de ambas naciones se trabaja en las rutas, pero las precipitaciones complican las tareas”, explicaron a LA NACIÓN desde el organismo nacional. De hecho, frente a este contexto, del lado argentino, solo se encuentra habilitado el tránsito hasta la zona de Uspallata. En esta localidad, también se observa concentración de camiones en el playón oficial. En el área fronteriza chilena, la situación es compleja: en la zona de Portillo hay más de 60 centímetros de nieve acumulada al costado de la ruta. “Se esperan ahora lluvias del lado chileno, por lo que hay que seguir evaluando jornada tras jornada para determinar cuándo se vuelve a habilitar el paso”, agregaron las fuentes.
Advertencia
En Mendoza no solo el principal paso a Chile está cerrado, sino que en el sur provincial, en Malargüe ya está interrumpido el Paso Pehuenche. Por eso, los cruces alternativos en operatividad son Pino Hachado, Cardenal Samoré y Mamuil Malal, en Neuquén, de 9 a 18. De todas formas, en estos sitios, hay observaciones a tener en cuenta: cielo cubierto, vientos, caída de piedras, nieve y hielo, por lo que equipos de Vialidad en ruta realizan maniobras de control y despeje.
Está claro que con el correr de las semanas, a la espera de la temporada invernal, se percibirá un marcado descenso en los viajes terrestres a Chile desde Mendoza, a través del Sistema Integrado Cristo Redentor. Vale recordar que desde el verano, tras la brusca devaluación, más de 6000 personas llegaron a viajar por día durante los fines de semana. En el mes último, la baja comenzó a sentirse, ligada a las inclemencias climáticas: se registra un promedio de 1500 personas que cruzan la Cordillera, sobre todo para realizar las compras durante la jornada. Además, hay otro dato que hace menos tentador el viaje: desde el 1° de junio comenzó a regir el horario invernal. Así quedó atrás la apertura durante las 24 horas del día. Ahora, se puede cruzar a Chile de 9 a 21, con el corte de tránsito a las 19 en Uspallata. De hecho, entre todas las recomendaciones de las autoridades para quienes emprenden el trayecto, que es obligatoria la portación de cadenas.
Para graficar el estado del tiempo en la alta montaña mendocina basta con observar las condiciones que se registraron durante este lunes, en la localidad fronteriza de Las Cuevas, donde la temperatura se ubicó en los -3°C, con viento de seis kilómetros por hora. “Las condiciones climáticas siguen siendo adversas, por lo que se espera inestabilidad hasta el viernes 14 de junio”, recalcan las autoridades argentinas.