AFP Video
El dominicano Rubby Pérez soñaba con ser beisbolista cuando Juan Marichal deslumbraba en las Grandes Ligas, pero un accidente de tránsito le llevó a la música. Terminó convertido en una de las voces más emblemáticas del merengue.Roberto Antonio Pérez Herrera puso a bailar con el nombre de Rubby a todo el Caribe con éxitos como "Volveré", "Enamorado de Ella" o "Buscando tus besos". Falleció el martes 8 de abril a los 69 años cuando colapsó el techo de una discoteca en la que se presentaba en Santo Domingo.El accidente deja cerca de un centenar de muertos. República Dominicana declaró tres días de duelo. Nacido el 8 de marzo de 1956 en Bajos del Haina, comenzó su carrera musical a finales de la década de 1970, después de estudiar en el Conservatorio Nacional de Música.Sobre los escenarios se ganó el derecho a ser llamado "La Voz Más Alta del merengue"."Estoy destrozado... El mejor cantante que ha dado el género, la voz más alta del merengue. El amigo y el ídolo de nuestro género se nos acaba de ir", lamentó otro mito de este ritmo bailable, Wilfrido Vargas, con quien Rubby Pérez saltó a la fama hace más de cuatro décadas.- "Me la pasaba jugando pelota" -"Yo me la pasaba jugando pelota", recordó Rubby Pérez en una vieja entrevista con el programa Al Tanto TV.En República Dominicana, país extasiado por el béisbol, su padre era fanático de uno de los equipos locales más populares, los Leones del Escogido, y esperaba ver a su hijo en los diamantes, así como su abuela, quien le crió, seguidora de otro de los clubes icónicos de esa nación, las Águilas Cibaeñas."Papá decía que yo tenía que ser el segunda base del Escogido", rememoró entonces.Todo cambió cuando fue atropellado por una camioneta a los 15 años, lo que le dejó lesiones permanentes en la pierna derecha.Sería su hermano, Neifi, quien cumpliría los sueños de su hogar beisbolero, con una carrera que lo llevó a las Grandes Ligas por 12 temporadas.La música arropó a Rubby, quien tuvo siete hijos, cinco mujeres y dos hombres. En el hospital, durante su larga rehabilitación, cantaba y tocaba una guitarra para entretenerse. Otros pacientes, impresionados, pedían más, más y más. No sabían su nombre, así que se referían a él por su número de cama: "Cama 13".- Jonrones musicales -Poco después de sumarse a grupos de merengue, uno de los ritmos tropicales bailables de más popularidad, su fama explotó en 1982 al unirse a la orquesta de Wilfrido Vargas."Volveré, volveré. Porque te quiero, hasta tu puerto volveré": su voz sonaba sin parar en la radio, primero en Dominicana y luego en todo el Caribe.Se hizo solista en 1987 y los éxitos continuaron sin parar. Sus temas llegaron a las prestigiosas listas Billboard. "Yo soy un cuarto bate y doy jonrones en la música", bromeó una vez como un guiño a su vieja pasión beisbolera.Su hija mayor, Zulinka, relató a la prensa que los rescatistas lo ubicaron entre los escombros de la discoteca Jet Set al oírle... cantando. No resistió, pero su voz seguirá tronando en las pistas de baile, como prometía en otro de sus muchos éxitos: "Sobreviviré".erc/jt/mbj/atm