Rock de los 80 ayudó a los homosexuales a liberarse: Halford

CIUDAD DE MÉXICO, noviembre 9 (EL UNIVERSAL).- Rob Halford, la voz principal de la emblemática banda de heavy metal Judas Priest, habló de cómo fue vivir dentro del mundo del rock desde que habló públicamente de su homosexualidad, pues consideró que, a diferencia de lo que se puede llegar a pensar, todo el maquillaje, glam y cabelleras largas que representó la música de los setenta y ochenta, dio la oportunidad a muchos jóvenes de vivir su identidad sexual con mucha más libertad.

Fue hace 24 años, cuando en 1998, Halford habló abiertamente de su homosexualidad, Ahora, más de dos décadas después, el músico recordó que cuando comenzó su carrera y Judas Priest se encontraba en lo más alto tuvo que titubear y pensar dos meses antes de hablar de sus preferencias, debido a la idea de que al reconocer que era gay, el futuro de la agrupación se iría directamente en picada.

Pese a que Rob Halford, de 71 años, habló de su homosexualidad hace más de dos décadas, el músico tuvo la oportunidad de hablar acerca del tema ahora que él, junto a los otros cuatro integrantes de la agrupación, fueron integrados en el Salón de la Fama del Rock & Roll, un museo ubicado en Ohio, Estados Unidos.

El evento tuvo lugar el pasado fin de semana y, cuando llegó el momento de condecorar a Judas Priest, Rob Halford se presentó como "el líder gay de la banda". Además, el músico aprovechó para contextualizar acerca de qué ocurría en la sociedad durante los años ochenta, cuando la música rock se encontraba en su mayor apogeo.

Halford estimó que pese a que fue una era en la que agrupaciones como Judas Priest, Poison y Kiss rompieron todo estigma de género, al portar largas cabelleras, maquillaje en todo el rostro y lucir atuendos ajustados y plataformas para caminar sobre el escenario, propiciando un ambiente muy queer entre su audiencia, detrás de todo ese glamour y libertad aparente, había también poca aceptación para la comunidad homosexual.

De esa manera, Halford, que vivía uno de los momentos más importantes de su carrera, también se encontraba atado a un mundo de contradicciones, donde se le sugería que guardara silencio respecto a sus preferencias sexuales pero, a su vez, se la aplaudía por lucir un aspecto fluido y andrógino.

Sin embargo, también reconoció que el movimiento del heavy metal y el glam rock abrió las puertas, indirecta o directamente, a los jóvenes homosexuales, para que optaran por vestir y usar el cabello lejos de las características normativamente masculinizadas; usar maquillaje, el cabello largo y apostar por formas de vestir variadas.