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Las zonas rurales disparan el contador de nuevos casos de COVID-19 en India

Nueva Delhi, 18 sep (EFE).- Tras superar los cinco millones de infecciones por coronavirus, la curva de contagios en la India sigue ascendente con más de 90.000 casos diarios desde hace diez días, un ritmo que se ha disparado por el aumento de positivos en las zonas rurales, donde vive gran parte de sus 1.350 millones de habitantes.

Los casos registrados en las últimas 24 horas alcanzaron los 96.424, muy cerca del récord global de 97.570 infecciones detectadas por este gigante asiático hace menos de una semana, lo que eleva el total de positivos por COVID-19 en el país a los 5,2 millones, según los últimos datos proporcionados por el Ministerio de Saludo indio.

Con este ritmo de contagios, todo indica que en las próximas semanas la India superará a Estados Unidos como el país con más infecciones por coronavirus, que con una media de unos 40.000 casos diarios alcanza ya los 6,6 millones de infectados.

En el extremo opuesto está el número de muertes, con 84.372 (1.174 en las últimas 24 horas), un cifra relativamente baja que se explica en parte por la juventud de la población india, donde los mayores de 65 años rondan el 5 %, según el último censo de 2011.

El Gobierno indio celebraba además este viernes un nuevo récord en el número de recuperaciones diarias, de 87.472 en las últimas 24 horas, elevando el total a los 4,1 millones (el 78,8 % de los casos positivos en el país desde el inicio de la pandemia).

"La continua sucesión de niveles muy altos de recuperaciones es testimonio de la eficacia de los protocolos de gestión y tratamiento clínicos emitidos por el Gobierno, que se han ido actualizando periódicamente con la aparición de nuevas evidencias", subrayó el Ministerio de Salud indio en un comunicado.

MEJORIA GENERAL EN LA INDIA

El pánico inicial entre la población, que llevó a colapsar los hospitales en todo el país, se ha ido disipando con un mayor conocimiento de la enfermedad, llevando a pacientes leves a permanecer en cuarentena en sus hogares, mientras centros sanitarios privados se unían a los públicos para tratar los casos más graves.

La doctora Nimrat Kaur, coordinadora adjunta sobre el terreno de la organización Médicos Sin Fronteras (MSF) en la India, explicó a Efe que ese es el caso del estado norteño de Bihar, uno de los más pobres del país y donde la ONG tiene un centro de COVID-19.

"Las dinámicas han cambiado (...) lo que es estupendo", afirmó la doctora Kaur, que aunque predijo que los casos seguirán en aumento por las relajaciones del estricto confinamiento impuesto a finales de marzo, con el inicio de la desescalada en junio y con casi todos los sectores abiertos en la actualidad excepto las escuelas y los vuelos internacionales, el sector sanitario "está preparado".

AUMENTO EN LAS ZONAS RURALES

Donde se está notando un fuerte incremento en el número de nuevos positivos por COVID-19 es en las zonas rurales, una realidad que la coordinadora de MSF vinculó en una etapa inicial, sobre todo en julio, a la llegada masiva de migrantes internos desde las ciudades por la falta de trabajo por la pandemia.

"Y ahora hay también un aumento por el número de pruebas", detalló, con nuevos centros habilitados para realizar test y procesos más sencillos, además del aumento de la concienciación en estas áreas más deprimidas, que acogen al 70 % de la población india.

Ese número de test alcanza ya los 61,5 millones en la India, que ha ido aumentando su capacidad de realizar pruebas hasta volver a superar el millón en las últimas 24 horas.

Entre los nuevos positivos, el 60 % proceden de 5 de los 36 estados y territorios de la India, con el occidental Maharashtra a la cabeza con más de 24.600 nuevas infecciones, seguido de los meridionales Karnataka (9.366) y Andhra Pradesh (8.702).

En el eminentemente rural Andhra Pradesh se encuentra el Hospital de Bathalapalli de la Fundación Vicente Ferrer, reconocido recientemente por el Gobierno regional como el mejor centro privado para el tratamiento de COVID-19.

El doctor español Gerardo Alvarez Uría, director del departamento para el tratamiento de enfermedades infecciosas del hospital, coincidió también en que la situación actual de la pandemia ya no es la de mayo o junio, cuando "el principal problema era que había muy pocos centros que trataran pacientes con coronavirus".

"El hospital estaba completamente lleno, no dábamos abasto, era una situación bastante difícil. Ahora mismo los casos siguen aumentando, pero hay más hospitales que están dispuestos a tratar a pacientes con coronavirus. Ya no hay una situación tan dramática como antes", explicó a Efe el especialista.

Uno de los cambios que se está produciendo, añade, es que "poco a poco" hay más pacientes de zonas rurales, aunque "todavía no son los mayoritarios, todavía no ha pegado fuerte en los pueblos", advierte.

Sin embargo, este médico, que lleva más de diez años trabajando en la India, se mostró optimista sobre el futuro de la pandemia en el país.

"Creo que llegaremos a una meseta dentro de poco, poco pueden ser unas semanas o unos pocos meses. (...) Donde veo que puede haber otro brote es si abren los colegios y no se toman medidas. (...) Si se logra controlar eso, podríamos llegar a una meseta en unas semanas", pronosticó.

Moncho Torres

(c) Agencia EFE