El “zar de la frontera” de Trump revela la primera ciudad en que se llevarían a cabo deportaciones masivas
El “zar de la frontera” entrante de Donald Trump amenazó a los funcionarios de la tercera ciudad más grande de EE. UU., Chicago, con acusaciones judiciales si no “[se quitan] de en medio” y le permiten llevar a cabo sus planes de deportación masiva.
En declaraciones a un grupo de republicanos de Chicago el lunes por la noche, Tom Homan dijo que la ciudad y el estado de Illinois estaban “en problemas” porque “su alcalde y su gobernador [apestaban]”.
La promesa de Trump de arrestar, detener y deportar a las personas que viven en el país sin permiso legal como parte de sus objetivos prioritarios, desplegaría a las fuerzas del orden federales, estatales y locales en las comunidades de inmigrantes de todo el país, empezando por la Ciudad de los Vientos, según Homan.
“Vamos a empezar aquí mismo, en Chicago”, dijo durante una fiesta navideña organizada por el comité Law and Order PAC y el club republicano Northwest Side GOP.
“Si el alcalde de Chicago no quiere ayudar, puede hacerse a un lado”, expresó, y añadió: “Pero si crea obstáculos —si alberga u oculta a sabiendas a un extranjero ilegal— lo llevaré a tribunales”.
Se espera que Homan, quien se desempeñó como director en funciones del ICE (Servicio de Inmigración y Control de Aduanas) durante el primer gobierno de Trump, lleve a cabo lo que el presidente electo ha descrito como “la mayor operación de deportación masiva en la historia de EE. UU.”, que sus aliados esperan ampliar para alcanzar potencialmente a millones de personas, más allá del ámbito de los inmigrantes indocumentados con antecedentes penales.
Homan también dijo que se espera que los hijos de los no ciudadanos sean deportados junto con sus familias.
“No pretendo en absoluto separar a las familias. Ese no es mi objetivo”, dijo Homan, y agregó: “Mi objetivo es hacer cumplir la ley, pero si te pones en esa situación, puede ocurrir. Ahora mismo no hay ningún plan en esta administración para separar familias, pero vamos a hacer cumplir la ley. Así que si los inmigrantes se ponen en esa situación, la culpa es suya”.
En una entrevista con el programa Meet the Press de la cadena NBC, Trump se hizo eco de su promesa de acabar con la ciudadanía por derecho de nacimiento, a pesar de que la 14ª Enmienda de la Constitución de EE. UU. consagra el derecho de ciudadanía a las personas nacidas en el país.
También sugirió que los hijos de inmigrantes que llegaron al país ilegalmente —los llamados “dreamers (soñadores)”, quienes gozan de protección bajo la Ley DACA (Ley de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia de EE. UU.)— podrían permanecer en el país a través de algún mecanismo.
Los padres de los dreamers “pueden llevarse [a sus hijos] a casa o dejarlos aquí. Pero no quedarán exentos”, dijo Homan.
Homan también dijo que las personas que se encuentren “con” inmigrantes buscados en el momento del arresto también podrían ser detenidas.
“Cuando vayan a buscar a ese delincuente, y lo encuentren, probablemente estará con otras personas, que no son [objetivos] prioritarios porque no son delincuentes. ¿Pero, adivinen qué? También van a ser detenidas”, dijo, y agregó: “Porque [el delincuente] me puso en esa posición. Así que jugaré a ese juego”.
El alcalde de Chicago, Brandon Johnson, y otros funcionarios demócratas de todo el país han prometido proteger a las comunidades de inmigrantes de las autoridades federales mediante disposiciones de asilo.
Homan, por su parte, advirtió a Johnson que “[se quitara] de en medio”:
“Ayúdanos a protegerte. Si no vas a hacerlo, quítate del medio”, expresó.
“No es ningún secreto que Illinois se enfrentará a innumerables ataques infundados durante los próximos cuatro años por parte del Gobierno de Trump”, dijo un portavoz del gobernador de Illinois, J. B. Pritzker, a The Independent.
“En lugar de responder a cada jactancia ridícula de los lacayos de Trump, el gobernador Pritzker se centrará en lo que se centró durante el primer mandato de Trump: liderar nuestro estado de una forma competente en lugar de generar caos”, añade el comunicado.
La congresista demócrata Delia C. Ramírez, la primera mujer latina en representar a Illinois en el Congreso de EE. UU., dijo que su distrito de Chicago se había “hecho más fuerte y poderoso gracias a los inmigrantes”.
“Más vale que [Homan] esté preparado para enfrentar resistencia. Puede que piense que en Chicago nos haremos a un lado y le permitiremos a Trump llevar a cabo una deportación masiva, pero haremos todo lo posible por impedirlo”, manifestó.
Según Aaron Reichlin-Melnick, investigador principal del American Immigration Council, el ICE “ya persigue a personas con antecedentes penales todo el tiempo”, ya que esto ha constituido una prioridad para los últimos gobiernos.
“Por lo tanto, la inmensa mayoría de las personas que serían objeto de una campaña de deportación masiva no tienen antecedentes penales. Son personas que, por lo demás, han llevado una vida respetuosa con la ley, viviendo, trabajando y, en muchos casos, pagando impuestos”, dijo Reichlin-Melnick el martes a los miembros del Congreso.
Según Reichlin-Melnick, lanzar una operación de este tipo en un periodo de 11 años costaría, como mínimo, un billón de dólares.
Traducción de Sara Pignatiello