¿Se pueden volver a congelar los alimentos?

¿Se pueden volver a congelar los alimentos?
¿Se pueden volver a congelar los alimentos?


Por años se ha difundido la falsa creencia de que ningún alimento que haya sido congelado se puede volver a congelar.

Sin embargo los alimentos podrían volverse a poder congelar de manera segura. Incluso la carne cruda puede volverse a congelar si está en óptimas condiciones y no está echada a perder. Siempre y cuando se sigan las técnicas apropiadas de congelamiento y descongelamiento.

Mito: Ningún alimento puede ser vuelto a congelar

Cualquier alimento crudo o cocido que ha sido descongelado adecuadamente puede volverse a congelar según aseguran dietistas certificadas del Servicio de Seguridad Alimentaria y Servicios de Inspección del Departamento de Agricultura de Estados Unidos.

¿Cómo debe de ser descongelado un alimento para ser apto para volverse a congelar?

Se debe seguir un sencillo protocolo, para pasar el alimento del congelador o freezer a la nevera o refrigerador:

  • Verifica que la temperatura de tu congelador o freezer esté como mínimo a un rango de 0° a: -0.4 ° F ( - 18 ° C).

  • Tu nevera o refrigerador esté mínimo a 39.2 ° F (4 °C).

  • Que no se haya dejado descongelar a “temperatura ambiente”, ni al sol.

  • Que sean alimentos que se hayan congelado en buen estado y siguiendo técnicas adecuadas de congelación y que no estén echados a perder.

¿Qué alimentos podrían volverse a congelar si se descongelan adecuadamente?

  • Alimentos como carne cruda, aves crudas, pescados y mariscos crudos. Sin embargo, si no cuentas con la seguridad que el procedimiento previo de congelación fue el adecuado es mejor no arriesgarse y no volverlos a congelar.

  • Es seguro descongelar de esta forma y volver a congelar incluso alimentos como fruta, vegetales, panes, pasteles, alimentos procesados, entre otros. Sin embargo, este proceso podría afectar su textura, sabor y color. Incluso hacerlos blandos o secos y menos apetitosos, dependiendo del alimento.

Qué tener en cuenta al descongelar

Nunca debes descongelar carne, aves, pescados o mariscos dejándolos a temperatura ambiente, al sol, o al chorro de agua caliente. Ya que de esta forma se acelera el crecimiento bacteriano y se multiplica rápidamente a temperatura ambiente. No es seguro descongelar los alimentos así y puede ser nocivo para la salud y ser causa de enfermedades transmitidas por alimentos (ETA).

Nunca deberías volver a congelar carne cruda o pescado si la descongelaste en el microondas o al chorro del agua fría.

Técnica adecuada de descongelación de alimentos

  • Descongelar alimento gradualmente, pasándolo del congelador al refrigerador, si está en su envase original o en un contenedor o bolsa herméticamente sellada.

  • Si dejas los alimentos en un contenedor reposar por 20 a 30 minutos en agua fría para descongelarse gradualmente, o cambia el agua cada 30 minutos y asegura que los alimentos se mantengan en su empaque original de plástico, sin abrir hasta que sean descongelados.

  • Si han sido descongelados por este método deben cocinarse y comerse inmediatamente. No los regreses a la nevera o refrigerador y menos aún los congeles nuevamente.

Cómo volver a congelar la carne cruda

Evita dejar la carne cruda en el refrigerador demasiado tiempo después de haber sido descongelada y antes de volverla a congelar ya que puede echarse a perder.

Un alimento descompuesto con frecuencia huele mal o a podrido y su consistencia puede ser pegajosa o viscosa.

Los alimentos sólo deben estar un tiempo refrigerados. Cada alimento tiene diferente tiempo para ser conservado en la nevera o refrigerador.

El pollo por ejemplo, debe comerse o volverse a congelar en un plazo menor de dos días desde la fecha que ha sido descongelado siguiendo el método adecuado en el refrigerador, que toma aproximadamente un día.

El pescado descongelado, camarones y mariscos también deben ser consumidos (o vueltos a congelar) dentro de un plazo no mayor de uno a dos días.

Recuerda:

Puedes volver a congelar los alimentos, siempre y cuando se hayan seguido las técnicas apropiadas de congelación inicial y descongelación.

Siempre considera los cambios en sus características organolépticas para tomar la decisión de volver a congelar un alimento y recuerda seguir la técnica apropiada.