Viggo Mortensen vuelve a la dirección con 'Hasta el fin del mundo'
Viggo Mortensen puede haber nacido en Estados Unidos y crecido en Argentina, pero es muy visible ascendencia nórdica la que le da el aspecto y la presencia que, como héroe o villano, le han hecho famoso en la gran pantalla. Pero ser actor no era suficiente para el danés-estadounidense. Tras una primera experiencia con 'Falling' in 2020, Viggo Mortensen vuelve a la dirección con un segundo largometraje, 'The Dead Don't Hurt' (en España, 'Hasta el fin del mundo'), en el que también firma la producción, el guión y la banda sonora.
¿Cómo han influido tantos años (Mortensen debutó en el cine con 'El testigo' en 1985) en su forma de trabajar detrás de la cámara?
"He aprendido observando a directores, hombres y mujeres con los que he trabajado durante 40 años o más", explica a 'Euronews'. "Ver cómo se comunican con el equipo, el director de fotografía, los actores, cómo se preparan, cómo cuentan las historias, eso es lo que he aprendido. Empecé tarde, mucho más tarde de lo que quería. Pero todo lo que aprendí viéndoles trabajar, pude utilizarlo en la primera película y ahora en la segunda. Espero haber evitado muchos errores por haber esperado a ser mayor para empezar a dirigir".
¿Con qué directores ha trabajado que más le hayan influido?
La lista empieza inevitablemente por David Cronenberg, con quien ha trabajado en siete películas, la última 'Los crímenes del futuro', y a quien conoció en Lisboa en el último LEFFEST (Festival de cine de Lisboa y Estoril). También destaca a Jane Campion, con la que hizo 'Retrato de una dama', y a la argentina Ana Piterbarg, con la que realizó el thriller 'Todos tenemos un plan' en 2012. Como en 'Falling', en 'Hasta el fin del mundo' Mortensen interpreta el papel protagonista.
¿Cómo es trabajar a ambos lados de la cámara al mismo tiempo?
"Quizá sea injusto para los actores con los que trabajamos, porque tenemos que apartarnos y hablar con los operadores de sonido y cámara entre toma y toma. Es más cansado físicamente al final de cada jornada. Pero como actores, cuando también dirigimos, somos más eficientes, porque no tenemos tiempo para dudar de lo que estamos haciendo. Así que somos más eficientes, pero nos cansamos más".
'Hasta el fin del mundo' es ante todo una historia de amor entre dos extranjeros en una tierra austera. La película comienza cuando Olsen, un inmigrante danés convertido en sheriff de un pequeño pueblo del Viejo Oeste, acaba de enterrar al gran amor de su vida, Vivienne, una canadiense francófona.
Demasiado ocupado para estar con los asuntos de la ley, deja que el alcalde lleve a la horca a un inocente por un crimen cometido por el hijo del jefe local, el odioso Weston Jeffries. Olsen se marcha para luchar en la Guerra Civil estadounidense y Vivienne, que trabaja en el bar local, es vulnerable a las insinuaciones de Weston. Si esta es una película sobre el amor, el odio también está siempre presente.
Olsen está interpretado por el propio Mortensen y Vivienne por la luxemburguesa Vicky Krieps, a la que el actor y director no escatima en elogios: "Sería una excelente candidata al Oscar, pero sé que no lo será, porque a la Academia no le interesa el cine independiente", afirma.
El 'western' es un género al que Hollywood, pero también el cine independiente, como es el caso, vuelven con regularidad y siempre con películas sobresalientes, décadas después de la época dorada del género. Naturalmente, como todos los de su generación, Viggo Mortensen creció viendo 'westerns'. ¿Cuáles le han influido más? "La lista sería demasiado larga para enumerarla aquí", dice.