República Checa prepara un hospital de campaña en previsión de falta de camas

Praga, 22 oct (EFE).- El Ejército checo tiene casi listo el hospital de campaña con 500 camas encargado por el Gobierno checo ante la posibilidad de un colapso de la capacidad hospitalaria ante el rápido aumento de casos diarios, que se ha disparado un 57 % en la última semana.

El hospital, ubicado en un centro de congresos de Praga, tiene previsto poder acoger a partir del domingo a pacientes de la covid con síntomas y que esté estabilizados o aquellos que no puedan pasar la cuarentena en sus domicilios.

Esta instalación entrará en funcionamiento si se cumplen los peores vaticinios de la pandemia y el sistema hospitalario se colapsa, algo que el ministro de Sanidad, Roman Prymula, teme que pueda ocurrir la segunda semana de noviembre.

El hospital de campaña, levantado por el Ejército, está equipado con 500 camas hospitalarias, entre ellas diez unidades de cuidados intensivos (UCI) con sistemas de respiración artificial, todas ellas dentro del pabellón principal, y que están a su vez distribuidas en diez secciones de 50 camas.

Cada sección está equipada con el sistema de información del Hospital Bulovka, centro de referencia del país en enfermedades infecciosas y que tiene bajo supervisión el operativo.

Se ha dispuesto también un pabellón para personal sanitario -con 120 camas de descanso-, medicinas, mantas, sábanas, albornoces, zapatillas y otros enseres.

Se estima que a plena capacidad, el hospital estará atendido por 200 miembros del Ejército, entre sanitarios, médicos y personal asistente.

República Checa ha sumado en las últimas 24 horas 14.968 nuevos contagios, un nuevo récord y un aumento del 25 % respecto a las cifras de ayer.

Con 1.066 contagios por cada 100.000 habitantes en las dos últimas semanas, República Checa es el país de la Unión Europeo con más enfermos per cápita.

Actualmente el número de contagios activos es de 124.000, de los cuales unos 4.400 se encuentra hospitalizados, cuatro veces más que a comienzos de octubre.

Hoy ha entrado en vigor una nueva restricción de movimientos, que el Gobierno insiste no se trata de un confinamiento, y en la que sólo se permite salir de casa para ir al trabajo, al médico, a hacer la compra, aunque sigue estando permitido ir a pasear al campo.

También se han prohibido las reuniones de más de dos personas en la calle.

Todos los comercios, excepto alimentación y farmacias, quedarán asimismo cerrados hasta el 3 de noviembre.

(c) Agencia EFE