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Policía chilena reprime una protesta pacífica contra el festival de Viña del Mar

Viña del Mar (Chile), 26 feb (EFE).- La Policía chilena reprimió este miércoles una nueva manifestación pacífica en la Plaza Vergara, en el centro de la costera ciudad de Viña del Mar, por considerar la protesta contra el Festival Internacional de la Canción, que se celebra esta semana en la urbe, como "no autorizada".

Unas 400 personas se congregaron por una jornada más en las cercanías de la Quinta Vergara, lugar donde se celebra el certamen musical chileno, en el que esta noche actuaban el español Pablo Alborán y el argentino Luciano Pereira.

Pacíficamente, aunque muy reivindicativos, los manifestantes se mantuvieron por horas en la plaza homónima al recinto del festival, apenas a una distancia de dos calles, justo en el acceso en donde el público iba llegando según caída la noche.

Pese a no cortar el tráfico ni generar disturbios, Carabineros (Policía militarizada) realizó diversas incursiones en la plaza para, en un primer momento, realizar controles de identidad a las personas congregadas, en su mayoría jóvenes, y posteriormente para disolver la protesta.

"Esta protesta no esta autorizada", se escuchó en reiteradas ocasiones en los altavoces de los carros lanza-gases que merodeaban los alrededores.

Acto seguido, centenares de agentes del Estado invadieron la zona realizando detenciones arbitrarias a diversas personas, al menos siete que Efe pudo constatar en el lugar.

Además, los uniformados utilizaron contra los manifestantes el carro lanza-aguas, popularmente conocido como "guanaco", a pesar de que estos estaban sin realizar altercados, únicamente gritando desde el interior de la plaza.

BAJA LA INTENSIDAD DE LA PROTESTA

A pesar de que desde el pasado domingo las protestas han sido continúas en la ciudad de Viña del Mar, a unos 100 kilómetros al oeste de Santiago de Chile, la cantidad de personas que acuden a las movilizaciones se ha reducido y los disturbios han bajado de intensidad hasta casi desaparecer.

Sin embargo, el Gobierno del conservador Sebastián Piñera desplegó centenares de agentes de Carabineros en la ciudad jardín para evitar que volvieran a ocurrir los graves hechos de violencia que sucedieron el pasado domingo, con destrozos en buena parte de la urbe.

Escuadrones de agentes antidisturbios a pie custodian toda la zona cercana a la Quinta Vergara y carros blindados, furgones y autobuses desplazan a pelotones de un lado a otro de la ciudad en cuestión de minutos.

Los carros lanza-aguas y lanza-gases se reparten por las calles aledañas al festival de la canción y brigadas de docenas de motoristas circulan sin cesar por los alrededores de la zona donde se congregan los manifestantes, los que son grabados desde al menos dos drones que sobrevuelan sin cesar el lugar.

LA PROTESTA EN CHILE NO SE RINDIÓ

Pese a que los chilenos han seguido saliendo a la calle desde el pasado 18 de octubre, cuando explotó la revuelta social en contra de la desigualdad de modelo socio-económico del país austral y el Gobierno de Piñera, la cantidad de personas que participan en las movilizaciones se redujo con el paso del tiempo.

Aún así, el festival de Viña del Mar volvió a poner de manifiesto en las calles el descontento de la gente contra el sistema y las protestas, que dejan al menos 30 fallecidos en más de 4 meses, están lejos de acabar.

"Estamos acá, somos gente que trabaja, no somos delincuentes. Dejamos muchas cosas de lado por estar aquí y ganar la pelea, que tenemos que ganar sí o sí. Y no estos "concha su madre" (la Policía) que van a quedar todos rendidos", dijo a Efe un manifestante que se identificó como Gerardo, oriundo de la vecina Valparaíso.

La basta presencia Policial no evitó que tanto él como otros jóvenes gritaran consignas durante horas, principalmente contra los carabineros y la represión ejercida por estas fuerzas del Estado.

Sobre la institución recayeron durante los más de cuatro meses de protestas acusaciones por violaciones a los derechos humanos, se les criticó su actuar para reprimir las protestas y se les señaló como responsables de los miles de heridos en las marchas y manifestaciones en todo el país.

"Está lleno de policías y ellos no son de Viña, son de Santiago y Valparaíso. La gente está cansada pero salimos todos los días (a protestar) porque está el derecho a manifestarse y queremos que las cosas cambien", indicó otra manifestante que se identificó como Lucero Fernández, de 15 años.

(c) Agencia EFE