Nueva noche de protestas y rezos en Israel pese a las normas de confinamiento

Jerusalén, 9 oct (EFE).- Pese a las normas del confinamiento agravado en Israel, que limitan severamente las manifestaciones y el rezo en grupos, la Policía vivió anoche una nueva jornada de multas y detenciones para impedir ambas cosas.

Cientos de manifestantes se congregaron en la céntrica plaza de Habima de Tel Aviv para marchar hacia la localidad costera de Yafa pidiendo la dimisión del primer ministro, Benjamín Netanyahu.

La severa limitación por el Gobierno del derecho a manifestación (en grupos de 20, con distancia de dos metros entre los participantes, que no se pueden alejar a más de mil metros de sus residencias) debía haber finalizado ayer pero fue prolongada una semana más y no ha hecho desaparecer las protestas de los indignados por las acusaciones de corrupción y por la mala gestión de la pandemia.

Además de la protesta de Tel Aviv se registraron otras manifestaciones menores en otras localidades en varios puntos del país.

En la de Tel Aviv la Policía impuso decenas de multas por no cumplir las normas del confinamiento, en su mayoría por estar más alejado de sus residencias de lo permitido y también por no llevar puesta la mascarilla, y realizó tres detenciones.

"La Policía se movilizó en varias áreas para asegurar las protestas. Los manifestantes decidieron marchar en las calles sin coordinarlo con la Policía. Unidades de la Policía gestionaron los incidentes, repartieron multas a quienes no cumplieron las normas del Ministerio de Sanidad y policiales y arrestaron a tres personas por causar disturbios y confrontar a los agentes", explicó esta mañana un comunicado policial.

El movimiento de las Banderas Negras, uno de los que impulsa las protestas contra Netanyahu, dijo que fueron miles los que protestaron en todo el país y anunció "manifestaciones gigantes" para este sábado, día de la semana en el que se registran desde hace cuatro meses las protestas masivas contra el jefe del Gobierno.

Además, como ya viene siendo habitual, esta madrugada la Policía tuvo que dispersar a cientos de ultraortodoxos que se congregaron cerca de las sinagogas.

En el asentamiento de Modiin Illit se registraron enfrentamientos cuando decenas de fieles se negaban a abandonar una sinagota, pese a estar prohibido el rezo en interior. La llegada de la Policía hizo que cientos de miembros de la comunidad acudieran al lugar a protestar por la prohibición, informó el digital Times of Israel.

A lo largo de este periodo festivo judío de Sucot han sido comunes los enfrentamientos de las comunidades ultraortodoxas, las más afectadas por el coronavirus, con la Policía, tras la prohibición de rezos masivos y en el interior de sinagogas, y el límite a la movilidad impuestos para controlar la expansión de la segunda ola de la enfermedad, que ha situado a Israel entre los países del mundo con mayor morbilidad.

Con nueve millones de habitantes, el país ha sufrido desde marzo 1.864 muertes y más de 286.000 contagios por coronavirus, más de la mitad de estos solo en el último mes.

(c) Agencia EFE