(FOTOS) Las veredas argentinas, el primer lugar de discrepancia política

Por Lez – Buenos Aires, Argentina

Las facciones políticas argentinas medirán su aprobación popular este domingo en las urnas durante las Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias (PASO), etapa que abre la posibilidad de reorganizar el Congreso, una cuestión a decidirse el venidero 22 de octubre en elecciones generales. Después de semejante proceso, los diputados y senadores electos discutirán otra vez con vehemencia; pero, antes, los roces van sucediendo entre militantes en el primer foro visible a la sociedad: la vereda.

Ciertas esquinas de algunos barrios o determinados puntos de las zonas más populosas de la ciudad suelen ser tomados por los partidos previo a las elecciones. Sus militantes sitúan una mesita y se colocan allí con la intención de captar votos a través de charlas fugaces o, al menos, dejando en manos del transeúnte la boleta en la que se lee programa y candidatos de su filiación. Es aquí donde aparecen las primeras rivalidades, porque, aunque predomina el clima amistoso, las diferencias no demoran en exteriorizarse.

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El sábado 5 de agosto uno de los candidatos a diputado en CABA paseaba por la calle Santa Fe acompañado de seguidores y camarógrafos. Próximo al puesto donde esperaban los de su grupo político en la intersección de la calle Ecuador, que compartían espacio también con otras facciones, una militante contraria no pudo aguantarse, haciendo con los dedos un gesto típico de los Kirchneristas, calmosa, se vio obligada a decirle: “Lousteau, vamos a volver”.

Parado frente al Obelisco, calle Corrientes y Cerrito, se encuentra Nicolás, militante de 1País, coalición de Sergio Massa, Margarita Stolbizer y Patricia Donda. “En otra campaña me quisieron correr de lugar, pero esta vez ha estado tranquilo. No vamos a definir una elección discutiendo por una esquina”, dice irónico. A pocos pasos hay una sombrilla con mesa desde la que una muchacha saca las boletas de Evolución, la propuesta de Martín Lousteau, embajador de Mauricio Macri en Estados Unidos y ministro de economía de Cristina Kirchner entre los años 2007 y 2008.

Diariamente entregamos cerca de mil boletas”, comenta otro Nicolás, parado al cruzar la 9 de julio, a unos pasos de la salida del subte y enfrentando a un McDonald’s. Milita en la agrupación política La Campora y reparte los volantes de la coalición Unidad ciudadana anunciada el 14 de junio por la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner. “En capital pudiera ganar el Pro”, advierte con ironía, “con los votos que nos afanen a nosotros”.

– Pronóstico de un lado de la vereda –

Ambos entrevistados creen que en la ciudad de Buenos Aires la coalición oficialista Vamos Juntos se llevará la mayoría de los votos gracias al pacto logrado recién con quien es su candidata favorita, Elisa Carrió. También consideran que el segundo puesto lo alcanzará en puntaje la coalición de la expresidenta, con el candidato Daniel Filmus a la cabeza seguidos posiblemente por las propuestas de 1País.

Yo no veo que habrá una gran renovación en cuanto a composición de las bancas, el oficialismo podría conseguir algunos nuevos lugares, pero no obstante necesitará de coaliciones para encontrar apoyo a las leyes que lleve al congreso”, dice el Nicolás de 1País.

Camino a Plaza de Mayo encuentro que el Frente de Izquierda ha tomado el pedazo de la calle Florida junto al monumento a Roque Sáenz Peña, el presidente que promovió el voto universal, secreto y obligatorio en la Argentina. Desde un auto una voz dispara al aire los beneficios que tendrá la ciudadanía de votar por sus candidatos Marcelo Ramal, de espejuelos en el afiche, y Myriam Bregman, sonriente.

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“Reparto boletas en el tiempo que tengo libre después del trabajo. Soy becario de la UBA. Allá ellos”, se queja quien para mi asombro será el tercer Nicolás entrevistado esa tarde. Representa al Partido de los Trabajadores y ha señalado al lado opuesto de la calle donde pueden verse otras tres sombrillas, cada una de partidos distintos: “Tenían que estar trabajando y están ahí, algunas veces dos horas”.

– La gran intriga –

Este viernes no habrá más mesas y propagandas pues comienza la veda electoral, entonces faltarán pocas horas para que sucedan las PASO, la posibilidad de los partidos y coaliciones para ocupar bancas en el Congreso, aunque solo aquellos que superen el 1, 5 por ciento del voto popular llegarán a las elecciones generales de octubre. Mientras tanto, este primer momento electoral se lee también como una especie de plebiscito a la gestión de María Eugenia Vidal en la Provincia de Buenos Aires y Mauricio Macri en toda la Argentina, de modo que muchos ojos están puestos en los que suceda con el oficialismo.

Los tres militantes con los cuales conversé la tarde de lunes previo a la realización de las PASO se llamaban Nicolás. Llegué a pensar que se trataba de una broma, o incluso que era una especie de lineamiento secreto de las coaliciones a la hora de enfrentar periodistas en las campañas electorales. Pero la duda fue despejada por cada uno de ellos y luego debí conformarme, aunque a ojos del lector pudiera parecer increíble; al fin y al cabo la homogeneidad en sus nombres puede verse como una imagen de la política en sentido general: llegado al poder y pese las diferencias de ideologías, algunas veces las agrupaciones resultan la misma cosa.