Venezolano Maduro podría ir a EEUU a retar Obama

El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, durante un acto en Caracas, 12 mar, 2015. Ridiculizando a la calificación de Venezuela como una amenaza a la seguridad de Estados Unidos, el presidente Nicolás Maduro dijo el jueves que podría viajar a Washington para retar a su homólogo estadounidense, Barack Obama. REUTERS/Carlos Garcia Rawlins

Por Andrew Cawthorne CARACAS (Reuters) - Ridiculizando a la calificación de Venezuela como una amenaza a la seguridad de Estados Unidos, el presidente Nicolás Maduro dijo el jueves que podría viajar a Washington para retar a su homólogo estadounidense, Barack Obama. "Nosotros estamos exigiendo en todas las instancias diplomáticas del mundo que el presidente Obama rectifique y derogue el decreto inmoral que declara a Venezuela como una amenaza para Estados Unidos", dijo Maduro. En el peor enfrentamiento entre los rivales ideológicos desde que Maduro asumió el poder en el 2013, Washington declaró previamente esta semana una "emergencia nacional" por "la inusual y extraordinaria amenaza" proveniente desde Venezuela y sancionó a siete funcionarios por presuntos abusos a los derechos humanos y corrupción. El Gobierno de Maduro ha exigido evidencia de cómo amenaza a la seguridad de Estados Unidos. Por otra parte, acusó a Washington de ayudar a golpistas y de preparar una intervención militar. Funcionarios estadounidenses dicen que la intención del Gobierno de Obama es hacer que el Gobierno de Venezuela cambie sus métodos, no derrocarlo. Hablando en una feria literaria, Maduro, el sucesor de 52 años del fallecido Hugo Chávez, dijo que Venezuela estaba preparando un evento en Washington para defender su causa. "De repente, yo aparezco en Washington en esa exposición, a dar la cara, a poner la cara por mi país y a decirle al gobierno de Washington que están cometiendo graves errores con el mundo, con América Latina, y exigir respeto a la patria de Bolívar", declaró. No se entregaron más detalles del evento. La disputa ha dominado las noticias locales y ha opacado la crisis económica, con Venezuela exigiendo que Estados Unidos reduzca el personal de su embajada en Caracas desde 100 a 17 funcionarios. El líder opositor Henrique Capriles acusó a Maduro de usar la disputa como una cortina de humo. "La inflación disparada! La escasez también! Suben los homicidios y la pobreza! Y los sinvergüenzas de la cúpula hablándonos de una invasión", escribió en la red social Twitter. La coalición opositora de Venezuela ha buscado distanciarse de cualquier impresión de que respalda una intervención extranjera, mientras apoya las acusaciones de represión y corrupción. Aliados desde Rusia a Argentina han enviado mensajes de apoyo a Venezuela, al igual que el bloque regional sudamericano Unasur, mientras que los críticos de la política exterior de Estados Unidos han protestado. "Venezuela es uno de los pocos países con significativas reservas de petróleo que no se somete a las órdenes de Estados Unidos", escribió Glenn Greenwald, el periodista que publicó inicialmente los documentos filtrados por el fugitivo ex contratista de la agencia de espionaje estadounidense Edward Snowden. "Tales países siempre están en lo más alto de la lista del Gobierno y la prensa de Estados Unidos de 'Países que deben ser demonizados'", sostuvo. Avivando el sentir nacionalista, Maduro habló el jueves frente a una marcha "anti imperialista", mientras que se espera que la Asamblea Nacional le otorgue durante el fin de semana una ley de poderes especiales que dice es necesaria luego de la decisión de Estados Unidos. (Reporte adicional de Alexandra Valencia en Quito; Editado en Español por Ricardo Figueroa)