Un grupo islamista se atribuye el ataque en Nairobi; al menos 39 muertos

NAIROBI (Reuters) - Hombres armados irrumpieron el sábado en un centro comercial de la capital de Kenia y mataron a tiros al menos a 39 personas, incluyendo niños y familiares cercanos del presidente, en un ataque por el que el grupo islamista somalí al Shabab se atribuyó la responsabilidad. El tiroteo en Nairobi continuó horas después del asalto inicial mientras las tropas rodeaban el centro comercial de Westgate. Policías y soldados peinaron el edificio, buscando a los atacantes tienda por tienda. Un rescatista voluntario en el interior del centro comercial dijo que los asaltantes se habían escondido en el supermercado Nakummat, una de las mayores cadenas minoristas de Kenia. "Encontramos tres cadáveres en esta tienda", dijo Vipool Shah, parado apenas a unos metros de la entrada de supermercado y señalando el zapato de un niño en medio de un charco de sangre. "Y también encontramos algunos fallecidos ahí", agregó, señalando a un local de venta de hamburguesas. El ataque parecía diseñado para alcanzar un impacto a nivel global al tener como blanco un lugar frecuentado por occidentales. Francia dijo que dos de sus ciudadanos murieron y el Departamento de Estado en Washington sostuvo que tenía informaciones de que estadounidenses habían resultado heridos. Reino Unido afirmó que sin duda algunos de sus ciudadanos habían sido afectados. Al Shabab, que ha lanzado una campaña insurgente contra las tropas de paz africanas y kenianas en Somalia, había amenazado reiteradamente con perpetrar ataques en suelo keniano si Nairobi no retiraba sus tropas de la nación del Cuerno de Africa. "El Gobierno keniano está rogando por sostener negociaciones con nuestros muyaidines (guerreros) dentro del centro comercial", dijo el grupo en su cuenta oficial de Twitter. "De ninguna forma habrá negociaciones", agregó. Otro tuit publicado por al Shabab dijo: "Durante mucho tiempo hemos librado una guerra contra los kenianos en nuestra tierra, ahora es momento de cambiar el terreno de batalla y de llevar la guerra a su suelo". Se trata del mayor ataque ocurrido en Kenia desde que una célula de la red Al Qaeda perpetró un atentado con bomba en la embajada estadounidense en Nairobi en 1998, causando la muerte de más de 200 personas. ATACANTE ABATIDO El presidente de Kenia, Uhuru Kenyatta, dijo que más de 39 personas perdieron la vida, entre ellos algunos miembros cercanos de su familia, y que más de 150 resultaron heridas. "Hemos superado ataques terroristas antes. Los derrotaremos de nuevo", aseveró en un discurso televisado, prometiendo buscar y castigar a los autores del atentado. La presidencia keniana dijo en su cuenta de Twitter que uno de los hombres armados había sido arrestado pero que falleció después en el hospital. Las baldosas del centro comercial estaban manchadas con sangre y había casquillos de balas sobre el suelo, mientras que muchas ventanas estaban rotas. Un efectivo policial arrastró el cuerpo de una adolescente por una parte del centro comercial y la colocó sobre una camilla. Las fuerzas kenianas entraron por primera vez en Somalia hace dos años con la misión de reducir las incursiones de los militantes de Al Qaeda. Al Shabaab había amenazado antes con atacar el centro Westgate, popular entre los extranjeros de la capital, además de otros puntos como clubes nocturnos y hoteles conocidos por recibir siempre a occidentales. Una mujer que abandonó el edificio dijo a un periodista que uno de los atacantes ordenó previamente a todos los musulmanes que salieran de la zona. Suèrvivientes dijeron a Reuters que al menos uno de los atacantes era una mujer.