UE acuerda misión naval en Mediterráneo para perseguir a traficantes de personas

Por Robin Emmott y Alastair Macdonald BRUSELAS, 18 mayo (Reuters) - La Unión Europea acordó el lunes una misión naval en el Mar Mediterráneo para perseguir a los traficantes de personas que están llevando a inmigrantes desde Libia a Europa, pero partes de un plan más amplio para abordar el problema suscitaron polémica por las cuotas para recibir a quienes buscan asilo. Los cientos de muertes en el mar, como el ahogamiento de hasta 900 personas en un solo barco el mes pasado, llevó a los gobiernos europeos a buscar una respuesta más robusta, pero el bloque está dividido sobre cómo actuar con los que llegan en momentos en que crecen los partidos contra la inmigración. "Esto es solo el principio. Ahora comienza la planificación", dijo la jefa de política exterior de la UE, Federica Mogherini, sobre la misión naval. Añadió que la operación podría comenzar el próximo mes. Los detalles continúan siendo poco claros mientras los miembros consideran sus opciones. "Hay un claro sentido de urgencia. A medida que se acerca el verano, más personas están viajando", agregó. La Unión Europea quiere capturar a los contrabandistas y destruir sus embarcaciones frente a la costa de Libia para ayudar a frenar el creciente número de inmigrantes que huyen de la guerra y la pobreza en el norte de África y Oriente Medio. Pero el bloque quiere la autorización de Naciones Unidas para actuar cerca de un país que ha caído en la anarquía desde el derrocamiento de Muammar Gaddafi en 2011. El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, instó a que Europa dé el paso, en parte porque podría haber militantes de Estado Islámico "intentando esconderse también, mezclándose entre los inmigrantes" para llegar a Europa. Unos 51.000 inmigrantes han entrado a Europa este año cruzando el Mediterráneo, 30.500 de ellos a través de Italia. Cerca de 1.800 se ahogaron en el intento, según la agencia de refugiados de la ONU. En una cumbre de emergencia celebrada el mes pasado en Bruselas, la Unión Europea acordó "identificar, capturar y destruir las embarcaciones antes de que sean usadas por traficantes". Mogherini viajó este mes a Nueva York para buscar el apoyo de Reino Unido, Francia, Lituania y España para el borrador de una resolución en virtud al Capítulo 7 de la Carta de la ONU, que permite usar la fuerza para restaurar la paz y la seguridad internacional. Sin autorización de la ONU, la misión naval, que tendrá su sede en Roma, no podrá intervenir en aguas ni territorio libio para capturar embarcaciones. (Reporte adicional de Philip Blenkinsop y Robert-Jan Bartunek; editado en español por Carlos Serrano)