Turismo impensado: los estancieros y cabañeros esperan un boom de visitas

A pocos meses para el inicio del verano, estancieros, cabañeros y agencias de turismo rural se preparan para recibir una ola de visitantes. Este fenómeno será posible ante la amenaza del Covid-19 y la necesidad que ven los turistas de emigrar de las grandes urbes. Desde el Ministerio de Turismo señalaron que, a principios de noviembre, tienen pensado comenzar a mostrar todo lo relacionado con el turismo rural comunitario para impulsar la actividad en las localidades emergentes.

El turismo rural comprende desde el alquiler de una habitación en una estancia o cabaña en medio del campo hasta hospedarse en una localidad o pueblo pequeño, con actividades culturales que están siendo impulsadas desde las secretarías de turismo de cada región.

"Hemos visto una alta demanda en estos meses. Hay muchas más consultas que el año pasado tanto para escapadas de fin de semana como para estancias de alojamiento de varios días", dijo Verónica Pérez, socia de Estancias Travel, una agencia de turismo que abarca gran parte de la oferta y demanda que se genera en la provincia de Buenos Aires. "Pasó que vimos que muchas personas que antes no ofrecían sus estancias de manera turística las empezaron a abrir al público y decidieron ponerlas en alquiler. Esto el año pasado no se daba.", señaló.

La idea de escapar de la ciudad sin salir de la provincia, comenzó a tentar a muchos usuarios que ya buscan alternativas para pasar unos días de relax y lejos de sus hogares después de varios meses de aislamiento social y obligatorio. "Algunos no saben ni siquiera si van a poder irse al interior, esto es funcional como una escapada con lugares abiertos, habitaciones grandes, que son puntos a favor para las estancias", indicó Pérez.

Según mencionó, entre los servicios que hacen particular este tipo de turismo es que todas las estancias incluyen las tres comidas, cabalgadas y actividades propias del campo. "Las ideas surgen, generalmente para ir a pasar sea una noche de fin de semana o un domingo. Este era el público que se tenía antes de la pandemia, bien turismo que se escapaba una o dos noches y listo. Pero ahora por tema protocolo, se abrió el abanico para contratar los servicios de forma privada con estadías de 15 días o mensual con pensión completa", amplió.

No obstante, según señalan, la gente sigue teniendo mucha incertidumbre a la hora de contratar un servicio de hospedaje ante cualquier medida sanitaria que se pueda tomar en un futuro y la demora de la apertura al turismo.

En tanto, Pat Sánchez Pierri, que administra la estancia La Horqueta en Chascomús, contó que en los últimos meses ha visto un fenómeno que no se había dado en los 24 años que tiene de funcionamiento el campo. "Me están pidiendo más días para hospedarse. Antes me pedían solo una noche, y ahora me piden más de cuatro días y te dicen no importa si es en día de semana", observó.

"Antes la modalidad era día de campo con almuerzo, actividades y merienda y tenía la posibilidad de alojamiento porque la estancia forma parte de una casa. Pero se interrumpió por la pandemia y ahora estamos esperando tener la autorización de operar como si estuviéramos en Pinamar. Tenemos mucha gente que está interesada", agregó. "Hay muchas consultas de nuevos clientes y huéspedes habituales que quieren venirse", indicó Pat que es referente del mercado.

Sin embargo, ante la circulación del virus, algunas de las actividades que ofrecían, no van a poder reanudarlas para evitar posibles contagios. El campo contempla una casa con cinco habitaciones con cuatro baños. En tanto, en agosto pasado, la estancia ofrecía por $6200 más IVA, un servicio que incluía todas las comidas, cabalgadas a caballo, actividades en lagunas y la posibilidad de usar la pileta.

Pero las ofertas para hacer turismo rural, son más abarcativas. Desde el Ministerio de Turismo y Deporte que comanda Matías Lammens, encabezan proyectos para impulsar iniciativas en distintas provincias y localidades para promover el turismo. Así lo mencionó Sergio Castro, director nacional de Planificación de Desarrollo Turístico: "Se ve una mayor dispersión de los destinos. Hay muchos más dentro de las selecciones que antes no estaban. Antes todo el mundo iba a Mar del Plata, Pinamar que son los elegidos por los turistas y ahora van a poder hacerlo en otras ciudades con comunidades aborígenes y productores", dijo.

"En este tiempo se ha puesto en valor toda la oferta del turismo rural con espacios de desarrollo. A principios de noviembre tenemos pensado mostrar toda la oferta de espacios rurales. Una iniciativa que lleva adelante junto con el Ministerio de Agricultura y el INTA. Entiendo que hay una alta demanda para hacer turismo rural para sentirse parte de la actividad", señaló.

En provincias como Jujuy, Entre Ríos y Tucumán se encabezan proyectos que van desde el rodeo de llamas, apicultura y recorridos por bodegas vitivinícolas. "La idea es que la gente vaya a estos lugares, haga la estadía y turismo", indicó.