Tres años de cárcel para una enfermera que husmeó en el historial médico de una antigua amiga

Habían sido amigas desde niñas, pero su relación se torció tras casarse de una de ellas hasta el punto de que la otra, enfermera, cotilleó el historial médico de su otrora amiga y la amenazó con revelar datos personales. La amenazada denunció y ahora la mujer identificada como Sara P. R. se enfrenta a una condena de tres años y tres meses de prisión que la Audiencia de Zaragoza, que ha sido quien ha dictado sentencia, considera “excesiva” pero que se ajusta a lo marcado por la ley. La acusación es por revelación de secretos.

La historia en común entre la denunciante y la denunciada se remonta a décadas atrás, según se ha revelado durante el juicio. Según informa El Heraldo de Aragón, ambas eran amigas de siempre. Tanto que llegaron a compartir piso. Sin embargo, cuando la demandante se casó, su relación se fue deteriorando hasta el punto de romperse por completo, según los testimonios recogidos durante el proceso, el 30 de marzo del año pasado.

Fue entonces cuando la acusada se cruzó en la calle con la denunciante y le amenazó con desvelar detalles de su historial médico, al que tuvo acceso gracias a su trabajo como enfermera en un centro de salud zaragozano. Aunque este no fue el único encontronazo -se supo durante que juicio que días antes había acudido a casa de su antigua amiga y lanzado vertido insultos sobre su familia-, sí fue el que colmó el vaso de la paciencia de la denunciante.

Esta acudió al servicio de salud para contar lo ocurrido y después denunció ante la Policía Nacional. La investigación abierta demostró que, efectivamente, sin razón ni justificación alguna la enfermera, con más de dos décadas de profesión, había entrando en el expediente de su antigua amiga. Durante el juicio la defensa argumentó que no había ocurrido y ella declaró que lo había hecho solo una vez y a petición de la afectada.

Sin embargo, una vez demostrado que había accedido al archivo no una si no dos veces, la defensa propuso una pena de año y medio de cárcel y dos de inhabilitación para ejercer su profesión. Sugerencia que no fue aceptada por el tribunal, que le ha impuesto tres años y tres meses de cárcel, seis de inhabilitación y el pago de una multa de 3.780 euros.

Los hechos fueron denunciados la primavera de 2017 y Sara P. R., que en su día echó en cara a su amiga que le habían “lavado el coco” y que su marido era “un cobarde y un sinvergüenza”, puede recurrir la sentencia que se enmarca dentro del delito de revelación de secretos ante el Tribunal Superior de Justicia de Aragón.

En el fallo emitido a finales de la semana pasada por la Audiencia, se puede leer que “sin restar importancia a la conducta enjuiciada”, como recoge El Heraldo de Aragón, los magistrados consideran que la pena aún ajustándose a lo que marca la ley es “excesiva” ya que el delito se enmarcaría dentro del “estándar menos grave” al no constar “que alterara los datos (del historial médico) o los utilizara”.

Por esa razón anuncian en el texto la opción de que el Consejo de Ministros le rebaje la pena a dos de prisión y tres de inhabilitación concediéndola un indulto parcial. El tribunal también ha señalado el hecho de que la condenada no cuente con antecedentes.