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Tom Holland nos da una lección de cómo aceptar lo que no puedes cambiar (como ser bajito)

Se espera que sean atléticos, altos y con cabello, que además tengan dinero, sean inteligentes, sensibles, hábiles en la cama y sin prejuicios… Suena a estrella perfecta de Hollywood, pero ni siquiera ellos son así.

La industria del cine, la gran creadora de referencias junto a la publicitaria, es cantera de talentos que obviamente son medidos constantemente por su físico, entre otros atributos, de manera que, así como nos dan ejemplos tóxicos de lo que debería ser "el príncipe azul", el modelo a seguir por el hombre guapo, o la mujer deseable, también constituye un foco de inseguridades para quienes trabajan en ella.

Recientemente hemos visto cómo muchos actores y actrices han puesto en la palestra cuánto les afecta el juicio constante a su cuerpo y apariencia. Desde Jonah Hill, quien pidió a sus fans que dejarán de opinar sobre sus fluctuaciones de peso, hasta la siempre admirada por su estilo, Sarah Jessica Parker, quien encaró inteligentemente las críticas sobre la manera en que ha envejecido, y así… No son pocos los famosos que se han mostrado como humanos comunes revelando cómo se sienten y hablando de sus inseguridades.

Tom Holland (Photo by Leon Bennett/Getty Images)
Tom Holland (Photo by Leon Bennett/Getty Images)

Tom Holland lo hizo hace poco. El joven que se ha convertido en una de las piezas fundamentales del Universo Marvel por encarnar al actual Hombre Araña, dejó claro recientemente que el hecho de ser famoso no lo exime de sentir inseguridades.

En una entrevista publicada por GQ, Holland se declaró como alguien muy complaciente a quien le preocupa mucho agradar a los demás, con lo cual está dispuesto a hacer lo que sea necesario para lograrlo, y esta necesidad de ser aceptado ha repercutido en otros aspectos de su vida como su apariencia.

Y aunque se ha preocupado por su altura, hoy admite que ha aprendido a concentrarse en aspectos de su vida que sí puede controlar. "No puedo hacer nada por mi altura, pero sí puedo ganar más masa muscular".

Definitivamente esta es una muy buena recomendación para quienes se sienten ansiosos porque les preocupan algunos aspectos de su físico. Pero ¿de dónde salen estas inseguridades?

(Getty Creative)
(Getty Creative)

La psicólogo clínico Adriana Gioni afirma que para cualquier persona que esté bombardeada por la publicidad y los medios de comunicación y redes sociales es prácticamente imposible no verse impactado de alguna manera, pues el objetivo de estos contenidos es justamente ese: convencernos de que necesitamos algo, sea un producto o una idea.

"Estas plataformas han establecido, a lo largo del tiempo, modelos de conducta, referencias y patrones de consumo, así contribuye a establecer y mantener los estereotipos, es decir, las formas en las que se suelen representar a los grupos de personas".

Aunque solemos hablar de cómo afectan estos estereotipos a las mujeres, a quienes hasta ahora a sociedad ha medido con mayor severidad, los hombres también entran en el saco.

(Getty Creative)
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"Es cierto que históricamente el peso de la imagen ha recaído más en ellas por temas sociales y culturales, pero la preocupación crece entre los hombres porque nuestra vida está constantemente haciendo a alusión a la importancia del físico", dice la psicóloga Leticia Galeón, consultada por la revista GQ, quien explica que las inseguridades aparecen por dos componentes fundamentales: primero, los referentes sociales y el aprendizaje cultural; segundo, la inteligencia emocional.

En el primer caso, se destaca que desde la infancia, en nuestra cultura, se le da mucha importancia y valor a la belleza. La comprendemos como un atributo que se traduce en ser mejor. Mientras que fortalecer la inteligencia emocional nos ayuda a reconocer nuestros sentimientos y a enfocarnos en lo que sí podemos controlar y aceptar lo que no. Tal como Tom Holland ha dicho que hace en relación a su estatura.

Cómo superar las inseguridades que todos tenemos

La prioridad, más que verse de una manera distinta, debe ser el bienestar. Sentirnos bien con nosotros mismos, aceptando lo que no podemos cambiar y trabajando por mejorar o ajustar lo que sí podemos.

(Getty Creative)
(Getty Creative)

Entre las recomendaciones de Galeón está usar lo que esté a nuestro alcance para cambiar lo que nos incomoda. Por ejemplo, si es la alopecia, buscar y evaluar las opciones para remediarla sin darle largas. Sin embargo, si el malestar emocional que determinado complejo o inseguridad nos ocasiona es muy fuerte, la recomendación es visitar al psicólogo.

Por otro lado, una alternativa que aporta beneficios cuantiosos es la práctica de ejercicio físico, pues no solo ayuda a modificar algo en nuestro cuerpo que nos incomode, sea el volumen, el tono muscular, o el sobrepeso, sino que, como se explica en el portal de la Clínica Mayo, contribuye elevar los niveles de endorfinas, hormonas que nos hacen sentir bien y ayudan a aliviar las preocupaciones cotidianas.

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