La tensión cambiaria cede en Argentina aunque persisten las dudas

Buenos Aires, 28 oct (EFE).- Tras tocar niveles récord la semana pasada, las cotizaciones del dólar estadounidense en los mercados alternativos de Argentina se han dado algo de respiro en las últimas jornadas, acortando un poco la distancia con el tipo de cambio oficial, una brecha que, no obstante, sigue siendo elevadísima, en medio de persistentes dudas entre los inversores.

El precio del denominado "dólar blue" (informal) está en retroceso desde que el pasado viernes tocara un máximo histórico de 195 pesos por unidad y este miércoles cerró en 181 pesos.

En tanto, la cotización de la moneda estadounidense en los canales financieros alternativos, el denominado "dólar bolsa" (MEP) y el "dólar contado con liquidación" (CCL), que se consiguen comprando bonos y acciones en pesos y vendiendo en dólares esos títulos, también han retrocedido notablemente luego de que el último jueves alcanzaran niveles récord.

Sólo como referencia, el CCL pasó de un máximo de 181,06 pesos a cerrar este miércoles en 152,30 pesos, lo que implica una bajada del 16 %.

Todas estas cotizaciones alternativas habían registrado una vertiginosa subida desde que a mediados de septiembre pasado las autoridades de Argentina impusieran nuevas restricciones para el acceso a dólares en la plaza oficial con el objetivo de frenar una fuerte caída en las reservas monetarias del Banco Central.

Pese a la descompresión verificada en las últimas ruedas, la brecha entre el tipo de cambio oficial y las cotizaciones alternativas sigue siendo muy amplia.

El "dólar blue" cuesta un 116 % más caro que en bancos y casas de cambio y el CCL, un 94 % más que el dólar en la plaza mayorista.

INTERVENCIONES OFICIALES

El relativo alivio que se percibe en estos días en el mercado cambiario se produce luego de que la semana pasada el Gobierno de Alberto Fernández reconociera que las restricciones dictadas en septiembre habían reducido la liquidez en el mercado de los dólares financieros, aumentando aún más la volatilidad.

En un cambio de estrategia, el Ejecutivo ha optado ahora por dar mayor fluidez a las operaciones del MEP y el CCL, cuyas cotizaciones inciden en el precio del "dólar blue".

Además, realizó el martes pasado una millonaria licitación de letras y bonos del Tesoro en el mercado doméstico, una operación orientada a captar la alta liquidez de pesos argentinos y descomprimir así la demanda de dólares como activo de refugio de inversores temerosos ante la creciente debilidad de la moneda local.

"Parecería que esta reducción de la brecha de las últimas tres jornadas tiene que ver en realidad con intervenciones oficiales en el CCL y el MEP. Lo que está tratando de hacer el Gobierno es de reducir la brecha, que actúa como epicentro de tensiones cambiarias, para tratar de generar confianza", dijo a Efe el economista Gustavo Ber.

Según el experto, más allá de estas intervenciones, no se ven "acciones de fondo que realmente inviten a pensar que la dolarización ya quedó atrás ni que se esté dando un respiro, toda vez que la cautela y la prudencia siguen estando a la orden del día".

Ber sostuvo que este "tiempo que está ganando el Gobierno" lo debe aplicar a "diseñar una hoja de ruta que implique atacar los desequilibrios monetarios y fiscales, con un consenso con el Fondo Monetario Internacional y un acuerdo político que otorgue respaldo".

Mientras esto no suceda, apuntó el experto, los inversores seguirán buscando cobertura cambiaria porque lo que hay es "una crisis de confianza", con una economía que en su tercer año en recesión cerraría 2020 con un desplome cercano al 12 %.

RESERVAS EN LA MIRA

El Gobierno ha insistido en que con las recientes medidas adoptadas busca un cambio de expectativas en los mercados cambiarios alternativos, pero asegura que no habrá modificaciones en la política monetaria respecto al tipo de cambio oficial, con una devaluación progresiva en cámara lenta.

El Ejecutivo afirma que hay un nivel de reservas monetarias suficiente para mantener esa política en el tipo de cambio oficial, algo que muchos consultores privados ponen en duda al señalar que, en realidad, las reservas de libre disponibilidad estarían en niveles insuficientes como para responder a una nueva arremetida cambiaria.

"El Gobierno no tiene reservas y las está perdiendo dramáticamente. Al 30 de septiembre las reservas eran de 41.379 millones de dólares, hoy se ubicarían en 40.140 millones de dólares, una caída de 1.239 millones en un mes", advirtió el economista Salvador Di Stefano.

Los expertos también siguen con atención otra variable que incide en el nivel de reservas: la salida de los depósitos en dólares de los bancos, que en lo que va de octubre habrían caído en 1.123 millones de dólares, según datos de la firma Portfolio Personal Inversiones.

Natalia Kidd

(c) Agencia EFE