Taiwán condecora a fallecido expresidente del Senado checo en un polémico viaje del jefe del Senado

Taipéi, 3 sep (EFE).- La presidenta de Taiwán, Tsai Ing-wen, concedió hoy una medalla póstuma al expresidente del Senado checo Jaroslav Kubera, fallecido el pasado mes de enero, durante una visita del actual titular del cargo, Milos Vystrcil, que ha generado fuertes protestas por parte de Pekín.

Kubera tenía previsto visitar Taiwán a finales de enero de este año, tan solo unos días antes de morir de un infarto, y Tsai le calificó de "buen amigo" de la isla, considerada por las autoridades de la República Popular China (RPC) como una provincia rebelde que ha de ser reunificada con el resto del país, un objetivo para el que Pekín no renuncia a la fuerza.

Cabe recordar que la República Checa no tiene relaciones diplomáticas oficiales con Taiwán ya que Pekín exige a cualquier país que rompa sus lazos con la isla si quiere establecerlos con la RPC.

Por tanto, la visita del presidente del Senado, el segundo cargo público de más rango de la nación europea, fue recibida con disgusto en Pekín, que advirtió a la República Checa de que "pagaría un alto precio" por ella, una reacción que Praga consideró como un exceso, por lo que convocó al embajador chino a una reunión con el canciller checo, Tomas Petricek.

En el acto de hoy, Tsai aseguró que Kubera "hizo muchos esfuerzos" para mejorar las relaciones entre Taiwán y la República Checa, y recordó también la visita del expresidente checo Vaclav Havel (1936-2011) hace 16 años.

La líder isleña mostró su esperanza de que la condecoración póstuma se convierta en un "símbolo duradero de la amistad entre ambos países y su persistencia en los valores democráticos".

"Mientras persistamos en nuestros valores, los esfuerzos de Taiwán por preservar nuestra libertad y democracia serán vistos en el resto del mundo", agregó Tsai.

En el marco de esta visita oficial ha trascendido que dos bancos taiwaneses han mostrado interés en abrir oficinas en la República Checa, y que la aerolínea de bandera taiwanesa, China Airlines, está planteándose si abrir una ruta directa entre Taipéi y Praga cuando la situación de la pandemia de la COVID-19 mejore a nivel global y permita reanudar los vuelos internacionales a gran escala.

La delegación checa, compuesta por 89 miembros -entre ellos, diputados del Senado y empresarios- llegó el pasado 30 de agosto a la isla y se quedará hasta mañana.

Este martes, Vystrcil fue ovacionado por los diputados locales al proclamar en mandarín "Soy taiwanés", en alusión a las palabras del expresidente estadounidense John F. Kennedy, que en 1963 dijo "Soy un berlinés" en un discurso en Berlín Occidental, con motivo del 15 aniversario del bloqueo de la ciudad por la entonces Unión Soviética.

(c) Agencia EFE