"Sweet Tooth" busca inclusión

Nicole Trejo

CIUDAD DE MÉXICO, abril 28 (EL UNIVERSAL).- Christian Convery, el protagonista de "Sweet Tooth", ha pasado cuatro de sus 13 años trabajando el personaje de Gus, un niño mitad humano y mitad ciervo, cuyo ambiente familiar ha saltado, para él, de la misma la historia al set de grabación.

El ahora adolescente estaba en Nueva Zelanda grabando en la pandemia la historia apocalíptica junto al resto del elenco, que incluye a Nonso Anozie, Adeel Akhtar, Will Forte y Dania Ramírez.

"Era en un lugar llamado Queenstown, estábamos corriendo encima de una montaña, era la escena en la que Gus le dice a Tommy (Nonso Anozie): ‘hombre, llévame’ y recuerdo que ese día se estableció todo el ambiente para Sweet Tooth, así como la cantidad de magia y unión que me iba a llevar", dice Convery en entrevista.

En la nueva aventura de la serie sobre un niño extraordinario que posee unos enormes cuernos en la cabeza y dos tiernas orejitas, estar juntos es clave de la fortaleza, mensaje que los protagonistas consideran importante en una época en la que, después del encierro, los niños han aprendido de unión.

"Esta serie trata de enseñarle a los niños que la inclusión es universal y que debes tratar por igual a las personas a tu alrededor", señala Christian.

Además de tener estas características especiales, Gus, su personaje, forma parte de una generación de bebés que, como él, fueron denominados como "híbridos".

Al ser diferentes, muchos humanos quieren cazarlos y experimentar con ellos, para saber si son la causa o la cura de un virus que ha destrozado al mundo y que apareció al mismo tiempo que ellos en la tierra.

Por eso, para el actor, el relato de esta serie es un ejemplo de tolerancia y respeto hacia las diferencias, algo que es necesario aprender y compartir con los seres queridos.

"Es muy importante tratar a tu prójimo con respeto; siempre habrá ese tipo de discriminación y puedes hablar de ello con tu familia, porque todos somos parte de este mundo, es primordial entenderlo".

En eso se identifica su coprotagonista, Naledi Murray, quien para la segunda temporada se convierte en una niña valiente que ayuda a Gus y otros niños híbridos a luchar contra los humanos adultos que les quieren hacer daño.

"Hay muchas mujeres fuertes en mi vida que me explicaron sobre los cambios que Wendy está experimentando. Muchas opiniones que mi personaje tiene las saqué de las personas que me rodean, pero sin duda en quien más me inspiré fue en mi mamá, que es una de las personas más fuertes que conozco", explica.

La nueva tropa

Los nuevos episodios de la serie postapocalíptica de ciencia ficción transcurren tras la captura de Gus junto a otros híbridos, que nos dejó la temporada anterior, listo para idear un plan de escape junto a ellos y enfrentarse a nuevos peligros, como hacer frente al temible general Abbot (Neil Sandilands).

Junto a Gus, se encuentran un audaz topo, un tierno elefante, una intrépida cerdita, un juguetón zorrito y un tímido ratón, quienes forman parte de la nueva tropa del chico, quien en cada uno de sus nuevos amigos encontró a su familia, aun cuando él mismo emprendió ese viaje para hallar a su madre.

También Tommy (Anozie) y la doctora Aimee (Ramírez) son parte de su tribu en esta nueva aventura que retrata la importancia de la unión, un mensaje que los protagonistas consideran esencial compartir con los niños que los siguen después de la pandemia.

"En esta era, esta generación de niños está descubriendo lo que significa tener una familia y siento que todos están en el viaje de describir que nuestra gente es una prioridad, incluso porque tú puedes haber elegido a tu familia y de eso se trata esta segunda temporada, de amor y de encontrar una familia", explicó Naledi, de 12 años.

La segunda entrega de la serie, que está inspirada en el cómic homónimo de Jeff Lemire, llega esta semana a la plataforma Netflix.