Bailarín exótico le da un giro a su vida tras ser diagnosticado con el mal de Parkinson

Un bailarín exótico ha dado un giro completo a su vida luego de serle diagnosticado el mal de Parkinson.

Tras sentir que el lado izquierdo de su cuerpo se paralizaba, Anthony Catanzano, de 48 años, finalmente vio a un especialista gracias a su esposa, que le insistió que fuera al doctor.

Todo comenzó cuando el stripper, que también trabajó como modelo, entrenador personal y actor en el área de Nueva York, notó por primera vez que algo estaba mal al prepararse para salir de una torta gigantesca y sorprender a Betty White en un programa especial que se emitió en 2013 para el cumpleaños número 91 de la actriz y comediante estadounidense.

“Había estado dentro del pastel durante 20 minutos”, dijo el bailarín a The New York Post. el “Siempre fui muy flexible, pero luego me sentí muy rígido. Me pregunté por qué estaba tan incómodo”.

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Si bien el cuerpo, regularmente flexible de Catanzano respondió con dificultad en ese momento en el programa, el neoyorquino cuenta que salió del estudio pensando que la rigidez era simplemente una ocurrencia anormal y no le prestó mucha atención.

Para 2015, dos años después, fue que acudió al médico y se dio cuenta de que sufría de Parkinson, en su etapa inicial. “Seguí pensando, ‘¿Por qué yo? No entiendo”, dijo.

A pesar de tener la enfermedad degenerativa, que afecta el sistema nervioso y causa rigidez y temblores en el cuerpo, Catanzano continuó bailando puesto que, según el bailarín, era su salvación.

Desde que tenía 18 años, su cuerpo fue su instrumento de trabajo. Catanzano participó como modelo en numerosas campañas publicitarias y ganó concursos nacionales de fisicoculturismo. Pero una vez que no tenía control sobre su cuerpo, tuvo que dejar las presentaciones — en las que ganaba hasta 500 dólares en un par de horas– y decidió cambiar su vida.

¿Cómo lo hizo?

Catanzano cuenta que luego de ver el documental provegano What the Health (Netflix) cambió su dieta por una rica en proteínas, muy pocos carbohidratos y comida estrictamente libre de animales. Sus síntomas comenzaron a cambiar.

El bailarín atribuye su mejoría a su nuevo estilo de vida, que incluye cinco comidas veganas pequeñas al día y abundantes vegetales como papas, brócoli, arroz y lentejas. En lugar de pollo y carne, Catanzano usa sustitutos vegetales para la carne y el pollo.

“Cuando me cambié al veganismo, me sentí mucho mejor y mucho más ligero. Lo estaba haciendo muy bien y volví a bailar”.

Eso fue hasta septiembre de 2018, cuando se despertó sintiéndose paralizado. “Pensé que tenía un derrame cerebral grave”. Aterrizó en el hospital y finalmente fue atendido por la Dra. Susan Bressman, que trabaja con la Fundación Michael J. Fox, iniciada por el actor, quien es también víctima de Parkinson.

Entre su dieta saludable, la medicación, el descanso, las sesiones de acupuntura una vez a la semana, masajes corporales de 15 minutos que se realizan dos veces al día y el cuidado de los médicos, Catanzano se siente listo para volver a hacer ejercicio y salir a desnudarse.

“Estoy de vuelta en el negocio, y haciendo algunos shows al mes. Me siento muy bien”, dice.