Valverde y la "fuerza mayor" del coronavirus

Abu Dabi, 28 feb (EFE).- "Si se suspendieran los Juegos Olímpicos por el coronavirus, no pasaría nada, sería una casa de fuerza mayor", dijo hace 48 Alejandro Valverde en su hotel de Dubai, cuando aún no se había desatado la tormenta del coronavirus ni suspendido el Tour de los EAU.

Nadie sospechaba entonces que se iba a cancelar la prueba tras la quinta etapa y que toda la caravana se iba a ver encerrada en dos hoteles distintos hasta pasar los controles pertinentes.

El director del Giro, el mismo organizador que Strade Bianche, Milán San Remo, Tirreno Adriático y Tour EAU, señalaba su preocupación ante una eventual suspensión de dichas carreras por el coronavirus, pero confiaba en una evolución favorable.

"Claro que nos preocupa la posibilidad, pero vamos a seguir con lo previsto. Mientras no tengamos una comunicación concreta por parte del Gobierno italiano y las autoridades sanitarias no podemos dudar de la celebración de las pruebas. Hay que esperar".

Tres días después el coronavirus dejó de ser un comentario rutinario de los casos que se producían por el mundo para vivirlo de cerca.

En una entrevista con Valverde, quien espera acontecimientos junto al resto del Movistar en el hotel de los equipos, también totalmente cerrado, el murciano manejó la posibilidad de que su gran objetivo del año, los Juegos de Tokio, fueran suspendidos por el coronavirus. Su respuesta fue tajante.

"El coronavirus es una causa de fuerza mayor, si hay problemas y riesgo yo soy el primero que no quiero ir , está claro, pero espero que se solucione. Si no se puede ir, no pasa nada", aseguró.

Esa fuerza mayor se ha presentado en Abu Dabi, donde desde anoche se siguen realizando controles a toda la caravana de la carrera, ciclistas, auxiliares, personal de organización y medios de comunicación.

El Movistar de Valverde y el Ineos de Chris Froome pasaron los controles a última hora del pasado jueves, ahora se encuentran con todo el pelotón esperando las órdenes del protocolo puesto en marcha.

Froome, como Valverde, priorizó la seguridad y la salud por delante de cualquier interés deportivo.

"Es una pena la cancelación de la carrera, pero lo más importante es la salud publica. Todos estamos espetando las pruebas médicas y permaneceremos en el hotel hasta nuevo aviso. Espero la recuperación de los afectados y que no haya más casos".

(c) Agencia EFE