Seamos serios: si viene envuelto en plástico y desde Costa de Marfil, “no es ecológico”

Esa es la incoherencia que denunciaba este fin de semana una tuitera y que ha sido recibida en la red de los 240 caracteres como una muestra más del abuso que se hace de los plásticos cuando de envolver frutas y verduras se trata. Lo que @yayo_herrero argumenta en su tuit es que un coco que se vende como ecológico no puede estar envuelto el plástico y, además, venir de Costa de Marfil, con la de combustible que eso implica. No todo el mundo está al 100% de acuerdo con su argumentación, pero ha avivado un debate sobre un tema que lleva tiempo en la sociedad y al que muchos han contribuido en este hilo con más fotos de incoherencias de este tipo.

“Coco ‘ecológico’ envuelto en plástico y procedente de Costa de Marfil. Esto, aunque tenga sello, no es ecológico. Plástico y kilómetros recorridos se traducen en petróleo, cambio climático, contaminación y explotación de otros territorios y personas”, denuncia Yayo Herrero, que incluye el hastag #desnudalafruta, utilizado para reivindicar frutas y verduras libres de plástico.

En una sociedad cada vez más concienciada con el abuso de los plásticos que se hace y cómo estos contribuyen a la contaminación de unos océanos que no dan abasto para tragar la cantidad de este material que acaba en sus aguas, son muchos los que han criticado en redes sociales el uso sinsentido que se hace en algunos casos.

El de este coco, que además se vende como “ecológico”, es solo uno más, como se puede ver en el hilo generado a continuación, en el que se pueden encontrar más ejemplos. Como un mango, también ecológico, un tomate cortado por la mitad o kiwis que han hecho miles de kilómetros y llevan la etiqueta de ‘bio’.

Aunque conviene aclarar que ecológico no es sinónimo de respetuoso con el medio ambiente, como señala algún tuitero en sus comentarios, no deja de ser paradójico que un producto que se vende como más saludable y que no han sido tratado con productos químicos se venda en los supermercados cubierto de plástico. En cuanto al origen, ese es otro debate distinto, como sugiere @pacoquart.

Lo que sí intentan aclarar varios tuiteros es que el hecho de que los productos ecológicos sean envueltos en plástico se debe a que si no lo estuvieran se contaminarían de los pesticidas de los que no lo son y perderían su ‘libre de productos químicos’. ¿La solución? Comprar en tiendas 100% ecológicas, proponen. Que es la misma que sugieren muchos con frutas y verduras en genera. Acudir directamente a la frutería del barrio, donde los productos no se venden envasados, sino al peso. Algunas, incluso, ofrecen bolsas de papel para pesar.

Calabazas en bolsa de plástico, pimientos, mangos, cocos, kiwis, naranjas peladas vendidas en envase de plástico… pero también otros productos como el pan. En Mercadona, por ejemplo, se da la circunstancia de que antes de la renovación de su sección de panadería las barras estaban envueltas en unas bolsas que eran mitad plástico mitad papel. Desde que cambió la panadería, ahora es el usuario el que se sirve lo que quiere. Para ello ha de coger un guante, de plástico, y una bolsa, de plástico también.

Y mientras, desde hace unos meses, en aras de cuidar el medio ambiente, se cobran por ley las bolsas en los comercios.

La solución que propone la mayoría para eludir el abuso de plásticos en cuanto a verduras y frutas se trata es acudir al pequeño comercio a hacer la compra. (Foto: REUTERS/Mariana Bazo)
La solución que propone la mayoría para eludir el abuso de plásticos en cuanto a verduras y frutas se trata es acudir al pequeño comercio a hacer la compra. (Foto: REUTERS/Mariana Bazo)