Sergio "N", a prisión y lo acusan de tentativa de homicidio

ECATEPEC, Méx., junio 1 (EL UNIVERSAL).- Una jueza del Poder Judicial del Estado de México vínculo a proceso por el delito de maltrato animal en agravio al trato digno y respeto a su vida e integridad física a Sergio "N", quien arrojó a un perro a un cazo con aceite hirviendo, y determinó prisión preventiva justificada mientras dura el proceso en su contra, pues consideró que es un peligro para la sociedad y para los animales.

Además, la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM) obtuvo una segunda orden de aprehensión en su contra por su probable participación en el delito de homicidio calificado en grado de tentativa, en agravio de Óscar, locatario de la carnicería donde se registraron los hechos.

La jueza estableció un mes como plazo para el cierre de la investigación complementaria, tiempo en el que el expolicía de la Ciudad de México estará recluido en el penal de Chiconautla, en el Estado de México.

Al escuchar la decisión de la impartidora de justicia, el presunto responsable de la muerte del perro "Scooby", bajó la cabeza para llorar mientras se encontraba en el área de seguridad del juzgado oral adscrito al penal de Chiconautla en Ecatepec.

Este miércoles se llevó a cabo la audiencia de formulación de imputación en contra de Sergio "N", de 30 años, quien tenía su domicilio en San Pablo Tecalco, municipio de Tecámac, donde ocurrieron los hechos que fueron grabados por una cámara de seguridad y difundidos en redes sociales, causando la indignación de la sociedad.

En la diligencia que duró casi tres horas, se expuso que Sergio "N", el domingo en la mañana entró a la carnicería con razón social Chucky, para reclamarle a Óscar, el encargado del negocio, que molestara a su esposa.

"¿Por qué andas molestando a mi vieja?, ahora sí te vas a morir hijo de tu p...", le gritó y amenazó con la pistola que llevaba.

Luego tomó un cuchillo que utilizan para cortar la carne y también le advirtió que le quitaría la vida por su osadía. Óscar respondió a Sergio (aparentemente alcoholizado) que se calmara y se fuera de su local.

Al salir del establecimiento Sergio tomó entre sus manos a un perro color negro con beige que estaba en la vía pública frente a la carnicería y lo arrojó al cazo que hervía con manteca, y luego se fue en su vehículo marca Volkswagen tipo Pointer, color blanco.

La necropsia determinó que "Scooby" tenía quemaduras en varias partes del cuerpo y la causa de su muerte fue por un paro cardiorrespiratorio.

Al analizar las pruebas aportadas por la FGJEM, la jueza determinó su vinculación a proceso, pues había argumentos para demostrar su presunta responsabilidad en la muerte de un ser vivo, el cual tuvo una larga agonía, por lo que explicó, tuvo una conducta antijurídica.

Por lo que refiere a la segunda orden de aprehensión en contra del expolicía del sector Cuitláhuac, ésta se derivó de la denuncia realizada por Óscar, quien fue amenazado de muerte. Fuentes refirieron que el imputado señaló que no tenía intención de hacer daño al animal.

Se sabe que Sergio no contaba con antecedentes penales, ni faltas como servidor público, de acuerdo con fuentes consultadas por EL UNIVERSAL.