La Unidad Médica Nicaragüense cierra sus oficinas por "agresión del Gobierno"

Managua, 23 jun (EFE).- La Unidad Médica Nicaragüense (UMN), compuesta por doctores disidentes, anunció este miércoles el cierre de su oficina, en Managua, debido a "la agresión del Gobierno" que preside el sandinista Daniel Ortega, en medio de una ola de arrestos contra dirigentes políticos opositores y a menos de cinco meses de los comicios generales.

"Nos vimos obligados a cerrar nuestras oficinas. El asedio y la agresión de parte del Gobierno y sus paramilitares ha venido en ascenso en las últimas tres a cuatro semanas", dijo en una rueda de prensa el presidente de la UMN, José Vázquez.

La UMN, conformada por médicos que fueron despedidos del sistema sanitario estatal, o recibieron represalias supuestamente por atender a heridos durante las manifestaciones antigubernamentales que estallaron en abril de 2018, daba consultas gratis a familiares de los denominados "presos políticos" o personas que, según Vázquez, seguían siendo rechazadas por el sistema estatal, o a quienes lo necesitaran.

Aunque su sede en un barrio de clase media alta de Managua permanecía custodiada por policías y civiles armados considerados como "paramilitares" por los opositores, el "asedio" se incrementó en las últimas semanas, según el dirigente médico.

"Te toman foto, te piden la cédula de identidad, te interrogan, te llevan aparte, y la agresividad de muchos paramilitares en querer entrar a nuestra sede, el sentenciarnos que van por nosotros", dijo Vázquez.

El médico afirmó que los integrantes de la UMN continuarán atendiendo a los necesitados de forma "descentralizada", pero que no podrán continuar brindando su apoyo desde su sede, donde también acopiaban alimentos y medicinas para gente sin recursos.

"Con esta ayuda humanitaria fuimos objeto de ese asedio, que se aumentó en estas últimas semanas, sentenciándonos que íbamos a ir a la cárcel, sentenciando a los familiares de los que están presos que iban buscando atención, de llevarlos a El Chipote (cárcel denunciada como supuesto centro de torturas), y salen con un estado peor psicológicamente", explicó Vázquez.

La UMN también informó del cierre de una línea telefónica donde brindaban teleconsultas sobre la covid-19, porque los médicos recibieron llamadas con amenazas.

Vázquez afirmó que dicha línea era importante porque Nicaragua actualmente está bajo "una segunda ola" de la covid-19, con características de variantes de preocupación, es decir, con variaciones del coronavirus detectadas previamente en países vecinos, sobre las cuales el Gobierno no ha brindado información.

El cierre de esa oficina médica se da en medio de la ola de arrestos de políticos opositores, incluido cinco aspirantes a la Presidencia.

Nicaragua tiene previsto celebrar elecciones generales el 7 de noviembre próximo, en las que el presidente Ortega, en el poder desde el 2007, busca reelegirse por cinco años más.

(c) Agencia EFE