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Un sediento Oriente Próximo enfrenta un empeoramiento de escasez de agua

Cerca de la mitad de los 33 países que se esperan tengan serias problemas con el agua en 2040 están en Oriente Próximo, donde las aguas superficiales es limitada y la demanda es alta, dijeron los expertos que evaluaron a 167 países. Se prevé que 13 países de Oriente Próximo además de los territorios palestinos se enfrenten a graves dificultades de agua en 25 años, y ocho de ellos entraron en el top 10 global: Bahrein, Kuwait, los territorios palestinos, Qatar, Emiratos Árabes Unidos, Israel, Arabia Saudí y Omán. Investigadores del Instituto Mundial de Recursos (WRI, por sus siglas en inglés) -que compiló el primer índice que mide la demanda y el agotamiento de las aguas superficiales, como lagos y ríos, cada década entre 2010 y 2040 - dijo que Oriente Medio probablemente ya es la región con menor seguridad de agua en el mundo. Se basa en gran medida en las aguas subterráneas y agua de mar desalinizada, y se enfrenta a "excepcionales desafíos relacionados con el agua de un futuro previsible", escribieron los autores en sus conclusiones. Betsy Otto, director del programa global de agua del WRI, dijo que era importantes que los gobiernos entiendan los potenciales riesgos que enfrentan en relación a la cantidad de agua que necesitan para gestionar sus economías, incluyendo la creciente demanda a medida que la población crece y los aún imprevisibles impactos del cambio climático. "La buena noticia...es que los países pueden tomar medidas para reducir esa escasez y el riesgo asociado con cómo gestionan sus recursos de agua", dijo Otto a Thomson Reuters Foundation, citando Singapur como ejemplo de Estado que usa métodos innovadores. Una medida que parece se hará más común en Oriente Próximo y en otras partes es la reutilización de los sistemas de reciclado de aguas residuales. "No tiene mucho sentido tratar el agua en niveles de potabilidad, lo que permite que sea utilizada por los hogares y luego esencialmente se tire a la basura", dijo Otto. Algunos países de Oriente Próximo ya confían en la desalinización, una técnica para eliminar la sal del mar y el agua subterránea. Estas y otras naciones altamente escasas de agua también pueden se tengan que alejar de la producción de sus propios alimentos porque la agricultura consume agua, Otto señaló.