El sector agrario de Argentina abre su tradicional feria con críticas al Gobierno

Buenos Aires, 21 jul (EFE).- El sector agropecuario de Argentina, uno de los mayores productores y exportadores mundiales de alimentos, renovó sus críticas al Gobierno de Alberto Fernández este jueves, al inaugurarse en Buenos Aires la tradicional feria anual del sector rural, histórica vidriera del potencial del campo argentino.

La 134 edición de la Exposición de Ganadería, Agricultura e Industria Internacional, que estará abierta al público hasta finales de julio en el barrio capitalino de Palermo, representa el regreso de este evento tras dos años sin celebrarse por la pandemia de la covid-19.

La feria, que desde 1875 realiza la Sociedad Rural Argentina -una de las cuatro mayores patronales agropecuarias del país-, se ha consolidado como punto de referencia para la exhibición y premiación de la mejor genérica animal del país -con 2.500 ejemplares participando este año-, la celebración de rondas de negocios y la presentación de novedades en tecnología aplicada a la producción y en maquinaria agrícola y la oferta de servicios para el sector rural.

La "arena de Palermo", como la llaman, trae los aires gauchesco a la "gran capital", pero no sólo en términos del colorido folclore rural.

Y es que la tradicional feria es, además, una histórica palestra para que el sector agropecuario argentino, uno de los principales del país, alce su voz ante los gobiernos de turno para expresar sus reclamos sectoriales.

COMPLEJA RELACIÓN

Esta edición no es la excepción y se celebra en un momento tenso en el vínculo entre el Gobierno de Fernández y las patronales agropecuarias, que vienen de realizar hace una semana una jornada de protesta nacional y una huelga sectorial, que implicó no comercializar durante un día ni granos ni ganado.

La relación entre el sector y el Gobierno se ha tejido a base de múltiples controversias por medidas que el campo considera que le perjudican, como restricciones para exportar e importar y altos derechos de exportación, y condiciones macroeconómicas complicadas, como problemas cambiarios, de financiación, inflacionarios y hasta de escasez de combustible.

"Hay un sector mezquino del frente de Gobierno que permanentemente está metiéndole el dedo en el ojo al campo y provocándolo", dijo el presidente de la Sociedad Rural, Nicolás Pino.

El vínculo entre las patronales rurales y el kirchnerismo no ha sido nada fácil desde 2008, cuando estalló un severo conflicto por los derechos de exportación de granos y derivados que implicó huelgas comerciales, cortes de rutas y millonarias pérdidas para el país.

Por entonces, gobernaba el país Cristina Fernández y el actual presidente, Alberto Fernández, era el jefe de Gabinete, puesto que abandonó en medio de aquel conflicto con el campo.

La compleja relación sumó este jueves un nuevo frente de pelea: la posibilidad de que el Estado cobre a los agricultores un canon por el "uso propio" de semillas genéticamente modificadas, algo que las patronales rurales rechazaron con enfáticos comunicados.

LA POLÍTICA, PRESENTE

En la jornada inaugural de la feria la política dijo presente con la presencia de varios dirigentes opositores.

"Acá desfila la producción, el trabajo y la tecnología de un sector bien competitivo. Es una muestra de la Argentina que podríamos ser si generamos reglas de juego justas y, sobre todo, previsibles. Estamos desperdiciando oportunidades por culpa de un Gobierno enloquecido", dijo el diputado opositor Ricardo López Murphy.

A las puertas del recinto de exposiciones, en tanto, la Unión de Trabajadores de la Tierra, una agrupación de campesinos, realizó un "feriazo", una venta de frutas y verduras a precios "populares", para reclamar que el Parlamento apruebe una nueva ley de acceso a la tierra.

SECTOR CLAVE

La actividad agropecuaria y las cadenas industriales asociadas tienen un fuerte peso en la economía argentina.

Según datos de la Fundación Agropecuaria para el Desarrollo de Argentina, las cadenas agroindustriales generan el 70 % de los ingresos por exportaciones del país (54.895 millones de dólares en 2021) y emplean a 3,7 millones de personas, el 24 % del empleo privado en el país.

Argentina es el primer exportador mundial de harina y aceite de soja, el segundo de maíz, el tercero de porotos de soja y el quinto de harina de trigo, aceite de girasol y carne bovina.

(c) Agencia EFE