Sebastián Piñera intentará replantear su estrategia tras el resultado en el plebiscito

SANTIAGO, Chile.- Chile decidió el establecimiento de una nueva Constitución y el abrumador triunfo de la opción "apruebo" en el plebiscito generó múltiples reacciones en la sociedad chilena que inició el días después de la votación esperanzada en cambios y con la satisfacción del aumento de la participación, pese a la pandemia que condicionó el proceso electoral.

El Servicio Nacional Electoral chileno (Servel) informó los resultados oficiales en un último cómputo, con el 99,85%, de las mesas escrutadas. La opción a favor de cambiar la Carta Magna logró 78,27% de adhesión (5.886.421 de sufragios), mientras el "rechazo" consiguió 21,73% de las preferencias (1.634.107 de votos).

Popularidad en baja: tras el plebiscito, Piñera intenta reorientar su estrategia

Con respecto al mecanismo para redactar la nueva ley fundamental, y con el 99,81% de las mesas contabilizadas, la Convención Constitucional alcanzó 78,99% (5.646.427 votos) y la Convención Constitucional Mixta llegó a 21,01% (1.501.793 sufragios),

"Sin duda estamos frente a la mayor votación de la historia de Chile, desde el punto de vista 'votación' en votos absolutos, y además de eso, rompimos también la barrera que no superaba desde el año 2012 con voto voluntario el 49,2%", dijo el presidente del consejo directivo del Servel, Patricio Santamaría, sobre los más de 7,5 millones de personas que sufragaron en medio de la pandemia de coronavirus.

Los resultados también dieron cuenta que comunas de menores recursos aumentaron su participación, con el ejemplo de La Pintana, un sector del sur de Santiago estigmatizado por años y que elevó su cantidad de votantes a un 64,56% con respecto al ballottage de 2017 que ganó Piñera y donde votó 37,29%.

Tras su discurso de la noche del domingo, en el que llamó a la unidad del país y recordó que "una Constitución nunca parte de cero", el presidente Sebastián Piñera arribó en la mañana al Palacio de La Moneda, y se reunió con los todos los miembros de su gabinete para analizar los resultados.

Sin rol definido en medio del referéndum, la tarea del jefe de Estado se concentró en elevar porcentaje de participación, que el proceso se realizara en orden, y que su sector mitigara la imagen de fractura que proyectó.

"La derrota es para todo el sistema político en general de Chile. Ha quedado claro que la gente posee una desconfianza absoluta hacia los partidos y en su forma de actuar, y este resultado los golpea a todos por igual, sin hacer distinción. Y evidentemente, el presidente Piñera tiene que entender que también esto es un voto de castigo a su gestión a partir de lo que ocurrió en octubre del año pasado en la revuelta popular", dijo Máximo Quitral, politólogo y académico de la universidad UTEM.

Por su parte, el ministro del Interior, Víctor Pérez, destacó el rol del mandatario en los próximos meses, cuando aún le resta poco menos de año y medio para entrega el poder. "El presidente tiene un rol fundamental de superar la pandemia, recuperar empleos y ha demostrado en los hechos que tiene una capacidad de conducir un proceso democrático que nadie puede decir que no fue ejemplar", planteó en Radio T13

Al respecto, un sondeo de la empresa Cadem que se difundió este lunes informó que la desaprobación al mandatario alcanzó 78%. El muestreo, realizado ayer tras el proceso eleccionario, también reveló que solo un 14% de las encuestados aprueba la gestión del jefe de Estado.

Varios analistas, en tanto, plantearon a que partir del referéndum se iniciaba una suerte de carrera presidencial, en la que el alcalde del partido derechista UDI, Joaquín Lavín, y el alcalde del Partido Comunista, Daniel Jadue, asoman como los políticos con mayores posibilidades de llegar a La Moneda.

Tras la histórica votación, ¿cómo sigue el proceso constituyente en Chile?

Los próximos pasos que los chilenos deberán enfrentar en el inicio del proceso constitucional que se plasmó hoy, están orientados a la elección de los integrantes de la Convención Constitucional.

El órgano será electo en un 100% por los ciudadanos, no tendrá representantes del Congreso, y será paritario con respecto a la cantidad de mujeres y hombres en su composición. Aquella elección se realizará el próximo 11 de abril, y se elegirán 155 convencionales constituyentes que serán los encargados de escribir la nueva ley fundamental. Algunos miembros del gobierno y varias autoridades han manifestado su disposición integrar el ente institucional y tiene plazo hasta el 11 de enero para inscribirse.