Se cumplió promesa de juventud: "Si estamos solteros a los 40, nos casamos"

Mairi Gordon y Rhys McLellan fueron pareja en sus años de juventud, cuando los felices 20’s mantenían su piel tersa y sus ilusiones intactas. En 1995, ambos decidieron poner fin a su relación y se hicieron una broma que acabó convirtiéndose en una premonición: “Si llegamos a los 40 años solteros, nos casamos”. Más de 20 años después, con la piel menos tersa y las ilusiones llenas de cicatrices, Gordon y McLellan pasaron por el altar. Lo hicieron después de dos décadas de amores fallidos que les llevaron a la conclusión de que el suyo siempre fue un amor para toda la vida. Ésta es su historia. Gordon tiene 45 años de edad, es artista del maquillaje y tuvo una relación de 12 años cuyo fin la hizo regresar a sus orígenes, Edimburgo. Allí se encontraba McLellan, quien había bailado entre distintas relaciones desde que ambos labraron sus propios caminos. Ninguno de los dos se había casado o había tenido hijos en todo ese tiempo. En 2009, el ahora matrimonio se encontró de casualidad y el gusanillo del amor despertó. “Fui a un pase de modelo que una amiga había organizado para la organización caritativa St Columbas”, afirmó Gordon a The Scotsman. “Rhys era voluntario allí y cuando terminó el show nos fuimos a tomar una copa. Definitivamente, hubo una chispa entre nosotros pero no pasó nada porque los dos teníamos pareja en ese momento. Yo vivía en Cornwall y él en Edimburgo. Tres años más tarde, Gordon regresó a la capital de Escocia tras romper con su novio en 2010. “Un día me encontré con su madre y su hermana en una tienda, me dieron su teléfono y le llamé para quedar. Yo todavía estaba afectada por la ruptura anterior, así que no pasó nada entre nosotros y cada uno siguió su camino. Al año siguiente me enteré que su madre estaba en el hospital con cáncer. Volví a contactar con él para expresarle mis condolencias y saber cómo se encontraban. Unos meses más tarde comenzamos a quedar de nuevo y nos fuimos acercando más. Yo seguía algo asustada por que me hicieran daño otra vez, así que decidí no seguir adelante aunque tuviera sentimientos hacia él”, agregó a la publicación escocesa. En 2015, Gordon y McLellan formalizaron su relación definitivamente. Los dos estaban solteros y notaban que había sentimientos hacia la otra persona. Ella tuvo un accidente laboral que dejó su rodilla dañada y él se encargó de cuidarla. “Me hacía reír, iba a la compra y me cocinaba. En ese momento me di cuenta de que él era lo que siempre quise y que nunca le había dejado de querer. Él siempre me dijo que yo fui el amor de su vida”, señaló Gordon. Al año siguiente se comprometieron y el 25 de marzo de 2017 pasaron por el altar. “Nunca olvidaré el día en que rompimos y nos dijimos que si seguíamos solteros a los 40 nos casaríamos. Aún no me puedo creer lo que hicimos”.